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Cuidados de Enfermería en las hemorroides

Cuidados de Enfermería en las hemorroides

INTRODUCCIÓN

Las hemorroides, o como vulgarmente se las denominan “almorranas”, es una parte normal de nuestro organismo, pero cuando se inflaman o se desplazan de su lugar anatómico se producen las denominadas hemorroides.

Autores

– Estrella Alba García Gavilán (DUE en Servicio Andaluz de Salud)

– Miguel Ángel Gavilán López (DUE en HU Reina Sofía de Córdoba)

– Ángela Gavilán López (DUE en Servicio Andaluz de Salud)

Las hemorroides son una dilatación o inflamación de las venas del ano que según su localización pueden ser internas o externas y que pueden causar dolor, comezón y sangrado anal.

Las hemorroides son una patología frecuente, afectando a casi la mitad de la población en algún momento de sus vidas, y que afecta tanto a hombres como a mujeres.

METODOLOGÍA

Se ha llevado a cabo una búsqueda y revisión bibliográfica acerca de los “Cuidados de Enfermería en las hemorroides” en las principales bases de datos y en los siguientes metabuscadores: Google académico y The Cochrane Library.

PALABRAS CLAVE: hemorroide, almorrana, plexo hemorroidal dilatado.

ETIOLOGÍA

La causa de las hemorroides no se conoce exactamente, pero existen factores predisponentes como son:

-Factores hereditarios.

-Estreñimiento, al hacer esfuerzo para defecar se comprimen las venas hemorroidales.

-Diarrea, al producirse irritación.

-Estar de pie o sentado durante mucho tiempo seguido, sobretodo en el baño.

-Embarazo, sobre todo en las últimas semanas y parto.

-Edad avanzada.

-Obesidad. Al aumentar la presión del suelo pélvico.

-Ciertas enfermedades, como la cirrosis hepática.

-Ciertos tipos de ejercicios de actividad física.

TIPOS

-INTERNAS: Las hemorroides internas, en condiciones normales, están dentro del ano y se encuentran cubiertas por mucosa, al comienzo del recto, pero en ocasiones, cuando se inflaman pueden salir a través del ano (prolapso). Las hemorroides internas suelen ser la primera causa de sangrado rectal no doloroso. La cantidad de sangre puede ir desde una cantidad insignificante en la mayoría de los casos hasta una cantidad considerable que podría provocar un síndrome anémico.

Las hemorroides internas se clasifican en cuatro grados.

1º grado, la hemorroide se localiza en el tejido submucoso sobre la línea dentada. Puede defecar sangre roja viva.

2º grado, sobresalen al defecar pero se reintroducen espontáneamente, con el cese del esfuerzo.

3º grado, salen al defecar y el paciente debe reintroducirlas manualmente.

4º grado, las hemorroides son irreductibles y están siempre prolapsadas.

-EXTERNAS: Las hemorroides externas se encuentran en el esfínter anal y pueden desplazarse fuera del ano a modo de protuberancias. Estas están cubiertas por piel exterior. Suelen ser asintomáticas; pero a veces, pueden provocar trombosis aguda o ruptura con formación de hematomas (normalmente tras una limpieza excesivamente agresiva).

COMPLICACIONES

-Se pueden formar coágulos en las hemorroides, desencadenando la muerte del tejido que las rodea. Por ello es importante extirpar quirúrgicamente.

-Un sangrado excesivo y prolongado en el tiempo puede provocarnos anemia ferropénica, aunque es poco frecuente que suceda.

SÍNTOMAS

Los síntomas más frecuentes que producen las hemorroides son:

– Lo más característico es la propia palpación de las hemorroides en el ano (prolapso), que incluso pueden ser reducidas manualmente por la persona, al presionar suavemente con el dedo sobre ellas.

-Dolor o molestia anal, sobre todo al defecar o al estar sentado.

-Rectorragia o sangrado anal. (Sangrado de color rojo brillante).

-Picor o ardor en la zona anal.

DIAGNÓSTICO

El diagnóstico se realiza en función de los síntomas y mediante la exploración clínica (tacto rectal). En algunos pacientes es importante realizar algunas pruebas complementarias, especialmente para descartar otras enfermedades importantes, por ejemplo el sangrado anal también está presente en otro tipo de enfermedades como el cáncer colorrectal que habría que descartar, en este caso, haría falta una visualización de todo el intestino grueso mediante una colonoscopia.

Para confirmar el diagnóstico de las hemorroides se puede realizar una visualización con una cámara en la zona del ano (proctoscopia) y del recto (rectoscopia).

CUIDADOS GENERALES

-Evitar el estreñimiento, para ellos debemos añadir fibra a la dieta y tomar abundantes líquidos.

-Evitar la diarrea que agravarían las hemorroides, evitando el uso de laxantes.

-Evitar las comidas muy sazonadas y el consumo excesivo de alcohol.

-Evitar esfuerzos al defecar, reducir el tiempo de defecación.

-Usar papel higiénico suave, toallitas o una esponja con jabón neutro.

-Aplicar hielo envolviendo este en una compresa, el frío disminuye la hinchazón.

-Baños de asiento con agua fría o ligeramente tibia, nunca muy caliente, durante 10-15 minutos, 3 o 4 veces al día, de esta manera conseguiremos calmar el dolor.

-Lavado rápido con jabón neutro, después secar presionando suavemente con la toalla sobre la zona.

-Si las hemorroides están fuera y no se pueden introducir, procurar que no toque la ropa interior, colocando un algodón embadurnado con una pasta neutra.

-Evitar estar sentado durante largos periodos de tiempo.

-Reducir el consumo de café: también el exceso de sal, las especias, los ácidos, el chocolate, los picantes y el alcohol.

-Aunque piquen, no se deben rascar: si se frotan o rascan las hemorroides se irritan más.

-Los ungüentos que contienen corticoides pueden ayudar a disminuir el dolor y la inflamación.

-Las pomadas antihemorroides con corticoides o lidocaína (anestésico local) ayudan a eliminar el ardor y dolor aunque su uso se debe limitar, (no más de 5-7 días) porque pueden sensibilizar más la zona y provocar efectos secundarios como sangrado.

-Existen también medicamentos que pueden mejorar la microcirculación de la zona y reducir la inflamación, pudiendo ser de utilidad.

-Para los casos que no responden a los tratamientos anteriormente señalados, se puede recurrir a la cirugía, ya sea a través de la hemorroidectomía (extirpación de las hemorroides) o la ligadura de las hemorroides, la ventaja de estos procedimientos es que se efectúa de forma ambulatoria. Otros métodos son el tratamiento con láser, a través de inyecciones, y el de calor, llamado coagulación infrarroja, para reducir el tamaño de las hemorroides internas.

BIBLIOGRAFÍA

  1. Rev Sdad Valenciana Patol Dig 2001;20:81-83.
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  4. Shanmugam V, Thaha MA, Rabindranath KS, Campbell KL, Steele RJC, Loudon MA. Ligadura con banda elástica versus hemorroidectomía de escisión para las hemorroides (Revisión Cochrane traducida). En: La Biblioteca Cochrane Plus, 2008 Número 4. Oxford: Update Software Ltd. Disponible en: http://www.bibliotecacochrane.com. (Traducida de The Cochrane Library, 2008 Issue 3. Chichester, UK: John Wiley & Sons, Ltd.).