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Actividades y cuidados de Enfermería en las lesiones oftálmicas

Actividades y cuidados de Enfermería en las lesiones oftálmicas

A la hora de tratar las lesiones oftálmicas, el personal de Enfermería desempeña un papel importante, ya que está preparado para realizar distintas funciones como: una valoración básica, colaborar en el diagnóstico, derivar a oftalmología, o aplicar tratamientos prescritos.

Autores:

– Zahira Villa Campos. Enfermera.

– Míriam Domínguez Campos. Enfermera.

– Sonia Aljama Noguera. Enfermera.

Para realizar esto, se llevan a cabo diversas técnicas que son las siguientes:

Apertura del ojo. Se puede realizar manualmente o usando un elevador del párpado. Se realizará con la mano no dominante para usar la dominante en el diagnóstico y tratamiento. Se colocarán el 1º y 2º dedos encima de los párpados inferior y superior y se separarán.

Eversión del párpado. Con esta técnica se logra una vista completa de esclerótica y conjuntiva, por lo que el tratamiento y el diagnóstico serán mejores. Está indicada en salpicaduras de sustancias químicas e introducción de cuerpos extraños. Es más frecuente la eversión del párpado superior, aunque se pueden evertir los dos. El paciente mirará hacia abajo con los ojos abiertos para relajar los músculos elevadores. Se tomarán las pestañas superiores tirando hacia abajo y se apoyará un aplicador (objeto alargado para hacer palanca) en la zona externa del párpado, por encima del borde parpebral, y  se empujará con él hacia abajo para que el párpado se vuelva sobre el aplicador.

Lavados oculares. Consiste en la irrigación de suero fisiológico o agua sobre la conjuntiva. Se realiza para eliminar cuerpos extraños o sustancias del ojo. El paciente se colocará en decúbito supino o sentado con la cabeza hacia atrás. La aplicación será siempre desde el ángulo interno hacia el externo, a una distancia menor de 10 cm. La solución debe estar a temperatura ambiente debido a la sensibilidad del ojo a la temperatura.

Extracción de cuerpo extraño. Es una técnica a realizar por el oftalmólogo, aunque se realizará si no existe esa posibilidad. El paciente se colocará en decúbito supino o con la cabeza hacia atrás. Primero se intentará la extracción mediante irrigación con suero fisiológico, si no se consigue, se pasará a la siguiente técnica. Se aplicarán dos gotas de colirio anestésico para disminuir las molestias del paciente y los consecuentes parpadeos.

Después de un minuto, se evertirá el párpado (si es necesario) y se intentará levantar el cuerpo extraño con una hemosteta. Si es metálico, se podrá usar un imán que consiga que se adhiera el cuerpo extraño. Se recomienda realizar una tinción con fluoresceína para valorar una posible lesión corneal. Por último, se realizará un lavado con suero fisiológico, se aplicará una pomada o un colirio prescrito y se ocluirá el ojo.

Tinción con fluoresceína. Se realiza para identificar lesiones corneales y conjuntivales. La fluoresceína es un colorante fluorescente que deja las zonas lesionadas más condensadas al teñir la superficie ocular. Se suelen ver mejor con lámparas de luz azul cobalto. Se aplicará una gota de fluoresceína y se le pedirá al paciente que parpadee para que se extienda el colorante.  Después de inspeccionar la córnea, se hará un lavado con suero fisiológico.

Aplicación de medicamentos. Los colirios y las pomadas son los medicamentos oftálmicos más frecuentes. Es importante comprobar la fecha de apertura (debe usarse durante dos semanas como máximo) y el aspecto (turbiedad y precipitación). Se abrirá el ojo con la mano no dominante, el paciente mirará hacia arriba, y con la mano dominante se aplicará el medicamento sobre el párpado inferior, desde el interior hacia el exterior en el caso de las pomadas. Después el paciente cerrará el ojo y se ocluirá. Cuando haya que aplicar más de un colirio, habrá que esperar 2 minutos entre cada aplicación. Cuando se tenga que aplicar colirio y pomada, primero se administrará el colirio y después la pomada. Los colirios y pomadas oftálmicas no se recomiendan que estén abiertos más de un mes.

Oclusión ocular. Se realiza para lograr una menor movilidad palpebral y así impedir el roce del párpado con la lesión ocular. Las heridas curan antes al impedir el arrastre palpebral. Se suelen utilizar oclusores (parches de forma ovalada de algodón recubierto con gasa).