Inicio > Enfermería > Cuidados de Enfermería en pacientes con hepatitis C

Cuidados de Enfermería en pacientes con hepatitis C

Cuidados de Enfermería en pacientes con hepatitis C

Resumen:

La hepatitis C es una enfermedad viral que afecta al hígado y  se transmite  por vía sanguínea y seminal. Se trata por tanto de una afección que puede evitarse si se extreman las medidas preventivas que consisten en relaciones sexuales seguras y reducir al máximo el contacto con objetos personales de personas contagiadas. No suele presentar síntomas graves aunque algunos pacientes la padezcan de manera crónica. La medicación actual junto con los cuidados de Enfermería aseguran un alto porcentaje de curación de esta enfermedad.

Autores:

  1. Ana Hermosín Alcalde DUE. Centro de diálisis Diaverum (Cartaya).
  2. Elena Pereira Jiménez DUE. Interclinik
  3. Mª Dolores Loro Padilla DUE. Servicio andaluz de Salud(SAS)

Palabras clave: inflamación, hígado, virus, antivirales, sangre, profilaxis.

Introducción

La hepatitis C es una enfermedad infecciosa que afecta principalmente al hígado y es causada por el virus de la hepatitis C (VHC). La infección aguda es por lo general asintomática, pero la infección crónica puede producir lesión en el hígado y a la larga originar cirrosis. En algunos casos, los pacientes con cirrosis también presentan insuficiencia hepática, cáncer de hígado y varices esofágicas potencialmente fatales.

La hepatitis C se contrae principalmente mediante el contacto con sangre contaminada asociado con el consumo de drogas por vía intravenosa, el uso de instrumental médico no esterilizado y las transfusiones de sangre no testadas previamente. Esta última vía actualmente ha desaparecido prácticamente en la mayor parte de los países por los controles exhaustivos sobre la sangre y hemoderivados. Se estima que entre 130 y 170 millones de personas en el mundo están infectadas con hepatitis C.

La existencia de hepatitis C (originalmente «hepatitis no A no B») fue postulada en la década de 1970 y confirmada en 1989.

El virus persiste en el hígado de forma crónica en alrededor del 85 por ciento de los pacientes infectados. Esta infección persistente puede tratarse con medicamentos: la terapia habitual para tratar la hepatitis C es una combinación de interferón pegilado y ribavirina, y en algunos casos se añaden telaprevir y boceprevir. En determinadas situaciones clínicas, puede añadirse sofosbuvir. En general, entre el 50 y el 80 por ciento de las personas que reciben tratamiento se curan.

Algunas de las complicaciones de la hepatitis C a largo plazo son la cirrosis hepática y el cáncer de hígado, y como tratamiento puede ser necesario un trasplante de hígado. La hepatitis C es la causa principal de trasplante de hígado; sin embargo, el virus suele recurrir después del trasplante. Hasta el 2015, no existía ninguna vacuna preventiva frente a la hepatitis C, por lo cual para evitarla es imprescindible seguir las medidas de profilaxis recomendadas; entre ellas, no compartir agujas (consumo de sustancias adictivas) y utilizar preservativo en las relaciones sexuales.

Síntomas

La mayoría de las personas que estuvieron recientemente infectadas con hepatitis C no tienen síntomas en la mayoría de los casos. Algunas personas presentan amarilleamiento de la piel (ictericia) que desaparece. La infección crónica por lo general no causa síntomas, pero se puede presentar cansancio, trastornos cutáneos y otros problemas.

Las personas que tienen una infección prolongada (crónica) a menudo no tienen síntomas hasta que su hígado presenta cicatrización (cirrosis). La mayoría de las personas con esta afección están enfermas y tienen muchos problemas de salud.

Los siguientes síntomas se pueden presentar con la infección debida a hepatitis C:

  • Dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen
  • Hinchazón abdominal debido a líquido (ascitis)
  • Heces de color arcilla o pálidas
  • Orina turbia
  • Fatiga
  • Fiebre
  • Picazón
  • Ictericia
  • Inapetencia
  • Náuseas y vómitos

Como diagnosticarla:

Se hacen exámenes de sangre para verificar si hay hepatitis C:

-Enzimoinmunoanálisis (EIA) para detectar anticuerpos contra la hepatitis C.

-Análisis del ARN para hepatitis C con el fin de medir los niveles del virus (carga viral).

Se hacen pruebas genéticas para verificar el tipo de la hepatitis C (genotipo). Existen seis tipos del virus (genotipos del 1 al 6). Los resultados de los exámenes le pueden ayudar a su proveedor de atención médica a escoger el mejor tratamiento para usted.

Los siguientes exámenes se hacen para identificar y monitorear el daño hepático a causa de la hepatitis C:

  • Nivel de albúmina
  • Pruebas de la función hepática
  • Tiempo de protrombina
  • Biopsia del hígado

Prevención

Las medidas preventivas son clave en esta enfermedad tanto para evitar contraerla como contagiarla ya que no existe vacuna para ella.  Entre ellas podemos destacar:

-Los trabajadores de salud deben tener precauciones al manipular sangre.

-No comparta agujas con nadie.

-No se haga tatuajes ni perforaciones corporales, ni tampoco reciba acupuntura de alguien que no tenga un permiso o licencia.

-No comparta artículos personales como cuchillas de afeitar y cepillos de dientes.

-Practique las relaciones sexuales con precaución.

Si usted o su pareja están infectados con hepatitis C y han tenido una relación estable y monógama (sin otros compañeros), el riesgo de transmitir o contraer el virus de la otra persona es bajo.

El virus de la hepatitis C no se contagia por contacto casual, como tomarse de las manos, besarse, toser o estornudar, amamantar, compartir utensilios de comida o vasos para beber.

  • Tratamiento

La hepatitis C no siempre requiere tratamiento, porque en algunas personas la respuesta inmunitaria eliminará la infección espontáneamente y algunas personas con infección crónica no llegan a presentar daño hepático. Cuando el tratamiento es necesario, el objetivo es la curación. La tasa de curación depende de algunos factores tales como la cepa del virus y el tipo de tratamiento que se dispensa.

El tratamiento de la hepatitis C está cambiando rápidamente. El sofosbuvir, el daclatasvir y la combinación de sofosbuvir/ledipasvir forman parte de los tratamientos preferidos en las directrices de la OMS, y pueden lograr tasas de curación superiores al 95%.

Estos medicamentos son mucho más eficaces y seguros, y mejor tolerados que los tratamientos antiguos. El tratamiento con antivíricos de acción directa (AAD) puede curar a la mayoría de las personas infectadas por el virus de la hepatitis C (VHC) y es más breve (normalmente 12 semanas). Sin embargo, el interferón pegilado y la ribavirina siguen teniendo una aplicación limitada en algunas circunstancias en las que hay pocos datos que respalden los tratamientos únicamente con AAD. Aunque los costos de producción son bajos, los AAD antivíricos siguen siendo muy caros en muchos países de ingresos altos y medianos. Sus precios se han reducido drásticamente en algunos países (sobre todo de ingresos bajos), gracias a la introducción de genéricos.

El acceso al tratamiento del virus de la hepatitis C (VHC) está mejorando, pero sigue siendo limitado. En 2015, de los 71 millones de personas que había en el mundo infectadas por este virus, solo el 20% (14 millones) estaban diagnosticadas. Ese mismo año, solo se inició el tratamiento en el 7,4% de los casos diagnosticados (1,1 millones). Aún queda mucho por hacer para asegurar que esos progresos den lugar a un mayor acceso al tratamiento en todo el mundo.

Cuidados de Enfermería.

  1. Se debe explicar a los familiares y al propio paciente según su edad la importancia del reposo físico y verificar constantemente su cumplimiento.
  2. Respecto a la dieta y aclarando de cierto modo errores que aún se cometen en la población, ésta debe ser normograsa, normoproteica y normocalórica.
  3. Tomando en cuenta que las hepatitis fueran por virus B y C las medidas van encaminadas a:
  • Tomar precauciones con la sangre y las secreciones orgánicas protegiéndonos las manos con el uso de guantes a la hora de la manipulación.
  • El uso de material desechable de tipo parenteral y la separación aparte del material de los pacientes que no padezcan la enfermedad cuando no se disponga de material desechable.
  • Someter el material a solución de hipoclorito antes de enviarlo al Departamento de Esterilización.
  • Evitar los accidentes con agujas contaminadas con este virus.
  • Administrar la vacuna para el virus B a aquellas personas que tengan riesgo de contraer la enfermedad.
  • Rotular las muestras sanguíneas de pacientes con hepatitis antes de enviarlas.

Conclusión

Los cuidados de Enfermería en pacientes con  hepatitis C deben ir dirigidos no solo a curar la infección sino también a impedir que esta se contagie a personas del círculo del enfermo. Para ello, se incidirá en las medidas preventivas que consisten en  profilaxis y en extremar las medidas de precaución en el uso de jeringuillas, uso de guantes, reservas de sangre y cualquier otro tipo de material médico.

En cuanto a la medicación, las sustancias utilizadas aseguran un alto porcentaje de curación de la enfermedad.

Bibliografía

1.- Afdhal N, Zeuzem S, Kwo P, et al. Ledipasvir and sofosbuvir for untreated HCV genotype 1 infection. N Engl J Med. 2014;370(20):1889-1898. PMID: 24725239

2.– Ghany MG, Strader DB, Thomas DL, Seeff LB; American Association for the Study of Liver Diseases. Diagnosis, management, and treatment of hepatitis C: an update. Hepatology. 2009;49 (4):1335-1374. PMID: 19330875

3.– Wedemeyer H. Hepatitis C. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. 10th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders;

4.- Ferrer Pi S. Hepatitis viral aguda. Epidemiología, diagnóstico, profilaxis. Arch Pediat 1989; 40: 309-3192016:chap 80.

5.- Unidad de Análisis y Tendencias en Salud. Enfermedades y otros daños a la salud. Enfermedades Transmisibles 2000; 6 (238): 4-13

6.- López Díaz JR, Trujillo Toledo ME. Caracterización de la infección por virus de la hepatitis B en niños hospitalizados en el Pediátrico « Juan M, Márquez»

7.- Yepes Palacio NL, Sepúlveda Hincapé ME. Hepatitis Virales: Tópicos de Gastroenterología Infantil. ACOGANP 1998: 139-161