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Procedimiento enfermero en el sondaje vesical

Procedimiento enfermero en el sondaje vesical

Resumen

En este artículo se pretende poner en conocimiento a los profesionales de Enfermería la técnica correcta para el sondaje, de una forma aséptica, desde el meato uretral hasta le vejiga urinaria. Destacando la importancia de adquirir habilidades, conocimientos y actitudes que permiten desarrollar esta intervención.

Autores

Mª Dolores Sánchez Torrico. Diplomada Universitaria en Enfermería.

Fátima Ortiz Clemente. Diplomada Universitaria en Enfermería.

Antonio Castellano Cecilia. Diplomado Universitario en Enfermería.

Palabras Clave: sondaje vesical, técnica, vejiga.

Introducción

El sondaje vesical es una técnica invasiva y persigue varios fines diagnósticos y terapéuticos que son:

_ Facilitar la salida al exterior de la orina en casos de retención.

_ Control de diuresis.

_ Tratamiento intra y postoperatorio de algunas intervenciones quirúrgicas.

_ Mantener una higiene adecuada en el caso de escaras genitales.

_ Tratamiento crónico en aquellos pacientes que no vacían espontáneamente la vejiga.

Al tratarse de una técnica estéril, la deberían realizar conjuntamente el enfermero/a y el auxiliar de Enfermería, pero un enfermero capacitado para ello puede realizar solo este procedimiento.

Sondas vesicales

Las sondas vesicales son productos sanitarios de un solo uso e instrumentos con forma de tubo y de composición, calibre, longitud y consistencia variable. Las sondas más utilizadas son de látex, el látex siliconado, la silicona pura, el polivinilo y los poliuretanos.

Látex. De uso muy frecuente, sin embargo las sondas de látex pueden provocar alergia en las personas alérgicas a este material. Para evitarlo existen sondas de látex recubierto por una capa de silicona.

Silicona: Los catéteres de silicona son los que presentan mayor biocompatibilidad y a igualdad de calibre exterior, mayor calibre funcional (luz interior), por lo que pueden ser más finas y tener por tanto mejor tolerancia.

Material

Sonda vesical de calibre y material adecuado.

Campo estéril.

Lubricante urológico.

Gasas estériles.

Guantes estériles y no estériles.

Solución antiséptica diluida.

Bolsa colectora y soporte para la cama (sondaje permanente).

Agua estéril.

Jeringa de 10 cc.

Pinzas Kocher o tapón para pinzar.

Batea.

Procedimiento

Prepararemos el material necesario y colocamos en  batea, informaremos del procedimiento tanto a él como a su familia, nos lavaremos las manos y nos colocaremos los guantes no estériles, identificaremos al paciente al que le vamos a colocar la sonda.

Proporcionaremos al paciente toda la intimidad necesaria en su habitación, le pediremos que se coloque en decúbito supino si es varón o que adapte la posición de litotomía si es mujer. A continuación prepararemos el campo estéril y echaremos el material necesario sobre él, cargaremos la jeringa de 10 cc con agua estéril y la incorporaremos al campo, con la ayuda del auxiliar de Enfermería limpiaremos la zona genital con las gasas muy impregnadas en la solución antiséptica.

A continuación, nos colocaremos los guantes estériles y procuraremos una asepsia absoluta, cogeremos la sonda vesical e impregnaremos la punta con el lubricante urológico, la sonda la manejaremos con la  mano dominante, con la otra nos ayudaremos a manejar el meato urinario.

En los hombres, agarraremos el pene en ángulo recto y con el prepucio retraído, una vez introducidos unos 10 cm, colocaremos el pene en un ángulo de unos 60º y terminamos de introducir la sonda.

En mujeres, separaremos los labios mayores y menores e introduciremos la sonda hasta el final.

Una vez que salga orina a través de la sonda, la pinzaremos o la conectaremos a la bolsa colectora según la finalidad del sondaje. Inflaremos el balón de la sonda vesical con la jeringa precargada de agua esteril y con cuidado iremos retirando la sonda hasta que notemos la resistencia por el balón neumático. Si conectamos la sonda a una bolsa colectora, la colgaremos en el soporte para la cama. Evitaremos tirones y pinzamientos.
Finalizaremos la técnica recogiendo y desechando el campo estéril junto con los guantes, nos lavaremos las manos y registraremos el proceso  y sus complicaciones, si las hubiera, además de indicar cuidados y  fecha de colocación de la sonda.

Consideraciones

Si al introducir la sonda encontramos resistencia, no forzaremos la entrada ya que podríamos producir daños, probaremos una sonda de menor calibre o con guía, si aun así seguimos sin poder sondar, lo consultaremos con otro compañero y en su caso al facultativo correspondiente.

Hay ocasiones que tendremos que sondar sólo para extraer una muestra de orina estéril, en el caso de los hombres, tendremos que sondar tal y como se ha explicado pero sin llegar a inflar el balón. En el caso de las mujeres, existen cánulas femeninas de corto trayecto, que facilitarán la extracción de orina, la introduciremos unos 5-10 cm y conforme salga la orina la recogeremos en el bote de muestra y retiraremos la cánula.

La bolsa colectora la colocaremos por debajo del nivel de la vejiga para facilitar la salida de orina por gravedad y la dejaremos con holgura para evitar tirones.

En el caso de colocación de una sonda por retención urinaria, no dejaremos que vacíe la vejiga de manera continua, si no que pinzaremos la sonda de forma intermitente cada 200 ml de orina aproximadamente.

Retirada del sondaje vesical

Para la retirada de una sonda vesical no es necesaria la esterilidad. Nos colocaremos guantes no estériles tras lavarnos las manos y cogeremos una jeringa de 10 cc, una empapadera y una bolsa de basura, tras identificar al paciente y explicarle que vamos a proceder a la retirada del sondaje, le pediremos que adopte la misma postura que para la colocación y pondremos la empapadera bajo sus glúteos. A continuación vaciaremos el balón de la sonda extrayendo el suero con la jeringa y tiraremos de la sonda con suavidad hasta su total extracción, la desecharemos en la bolsa de basura junto a la empapadera y nuestros guantes.
Tras retirar el sondaje pediremos al paciente o a su familia que nos avise cuando haga la primera micción, si en el plazo de unas 6-8 horas el paciente no micciona, valoraremos la existencia de globo vesical por si hubiera que volver a sondar.

Referencias

Cateterismo vesical y mantenimiento. http://www.enferpro.com/tvesical_.htm

Castellote García MJ., Paricio Mateo T. Enfermería oncológica: Sondaje vesical. http://www.opolanco.es/Apat/Boletin12/sondas.htm http://www.infirmiers.com/inf/protocole/uronephro/sondageu.php