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Sangría terapéutica o flebotomía

Sangría terapéutica o flebotomía

La sangría terapéutica o flebotomía es un tratamiento médico encaminado a resolver diferentes enfermedades hematológicas, la hemocromatosis como patología más común. Otras patologías que requieren de este tratamiento son la poliglobulia, policitemia vera y anemia sideroblástica hereditaria.

AUTORES

Lorena Castellot Perales

Beatriz Sánchez Lomba

Sonia Sancho Salazar

Andrea Santisteban Zamora

RESUMEN:

Es una técnica sencilla y segura, similar a la que se lleva a cabo en una donación sanguínea, por lo que los pacientes que son sometidas a ella no deberían temer a posibles complicaciones. Dicho procedimiento es realizado por personal de Enfermería, el cual es bien tolerada por la mayoría de los pacientes, y sobre dicho personal recae la responsabilidad de la vigilancia y el bienestar del paciente mientras dure el tratamiento.

OBJETIVOS:

El objetivo principal de dicho trabajo es ampliar el conocimiento sobre dicha técnica y la forma de llevarla a cabo, tanto por parte de personal sanitario como por parte de los pacientes que son sometidos a ella y precisan saber qué es lo que le van a hacer.

Otro objetivo sería conocer las posibles enfermedades hematológicas más importantes que requieren dicha práctica.

MATERIAL Y MÉTODOS

Se realizó una revisión bibliográfica acerca de las diferentes enfermedades hematológicas que requieren tratamiento de sangría terapéutica, de la forma de realizar dicha técnica y sus posibles complicaciones. Se consultó páginas web, protocolos de diversos hospitales, guías clínicas…

PALABRAS CLAVE

“Sangría terapéutica”, “flebotomía”, “hemocromatosis”

SITUACIÓN DE LA SANGRÍA TERAPÉUTICA EN LA ANTIGÜEDAD Y ACTUALMENTE

Antiguamente la práctica de sangrías se llevaba a cabo para reestablecer la cantidad de sangre en el organismo, ya que en la Edad Media se pensaba que la mayoría de los males eran debidos a un desequilibrio entre humores-sangre, flema, bilis y atrabilis o bilis negra. “Sacando la sangre se saca la enfermedad” era el lema de los médicos.

Uno de los métodos principales de sangría era el uso de sanguijuelas que se colocaban en la parte del cuerpo del paciente afectada, dicho gusano absorbería la sangre antes de caerse.

Por otra parte encontrábamos la “venesección” que consistía en realizar un corte en el brazo y proceder a su drenaje. Se solía realizar con una lanceta de unos 3 centímetros de largo, penetrando en la vena y permitiendo salir a la sangre por esa pequeña herida. 1

En la actualidad, la sangría sólo se utiliza para el tratamiento de la hemocromatosis o la policitemia vera y el procedimiento de practicarla ha cambiado totalmente. Dicho proceso se lleva a cabo de la misma manera que una donación sanguínea, con la diferencia de que esta sangre no puede ser utilizada para tratar a otras personas y debe ser desechada. Por este motivo, a pacientes con patologías que necesiten este tratamiento, se les aconseja también hacer donaciones sanguíneas;  de esta manera esa sangre puede ser aprovechada para otros fines.

La policitemia vera es un trastorno de la médula ósea que lleva a un aumento anormal de la cantidad de células sanguíneas. Principalmente afecta a los glóbulos rojos, aunque también a las cantidades de glóbulos blancos y plaquetas. Se presenta con mayor frecuencia en hombres que mujeres y normalmente su aparición está asociada a la mutación de un gen por causas desconocidas. 2

La hemocromatosis es una enfermedad hereditaria en la cual se produce un aumento excesivo de la absorción de hierro y como consecuencia, se produce un acumulo anómalo del mismo en diferentes órganos del cuerpo.

Existen algunos factores clínicos que influyen en la aparición de dicha enfermedad: edad (a partir de los 50-60 años de edad), consumo de alcohol, vitamina C o suplementos de hierro, ciertas mutaciones genéticas… Por el contrario, la realización de donaciones sanguíneas previene la aparición de dicha enfermedad.

El tratamiento para dicha patología consiste en eliminar la cantidad de hierro acumulado en el organismo mediante la realización de sangrías o flebotomías. 3

TÉCNICA DE FLEBOTOMÍA O SANGRÍA

La sangría consiste en la extracción de un volumen de sangre (unos 450 cc) a un paciente, con la finalidad de tratar las patologías hematológicas anteriormente citadas. Con la sangría se extrae masa de células sanguíneas y volumen de sangre, por cada de 500 ml de sangre extraídos se extraen 200 – 250 ml de hierro. 4

MATERIAL NECESARIO:

  • Ficha del paciente donde encontraremos todos sus datos y antecedentes persones y donde, además, registraremos TA, cantidad de sangre extraída y si hay presencia de complicaciones.
  • Sillón o camilla donde se acomodará al paciente
  • Tensiómetro
  • Desinfectante para la piel
  • Gasa o algodón
  • Compresor de goma
  • Bolsa de sangre con capacidad de 450cc unida a aguja para punción
  • Esparadrapo
  • Peso para controlar la cantidad de sangre extraída
  • Zumo

PROCEDIMIENTO:

  • Se recibirá al paciente en la sala donde se le vaya a realizar la extracción terapéutica y deberemos preguntarle por la hoja de petición del médico donde figura el número de sangrías a realizar y la cantidad de sangre a extraer.
  • Preguntar al paciente si se encuentra en ayunas. Estos pacientes deben haber desayunado para evitar posibles complicaciones relacionadas con hipotensión arterial o hipoglucemia.
  • Se le pedirá que se tumbe en el sillón o camilla donde se realizará la extracción.
  • Se procederá a la toma de la tensión arterial. Tensión arterial sistólica mayor a 160 mmHg y tensión arterial diastólica mayor a 100 mmHg, tener precaución y consultar con el hematólogo. Del mismo modo ocurre si el paciente presenta una tensión arterial sistólica por debajo de 100 mmHg.
  • Se tranquilizará y explicará al paciente el procedimiento de la técnica si es la primera vez que se le realiza.
  • Colocaremos el compresor de goma en el brazo del paciente para conseguir la ingurgitación de la vena.
  • Revisaremos, palparemos y elegiremos la vena adecuada para la punción.
  • Una vez elegida la vena, procederemos a la desinfección de la piel mediante la aplicación de alcohol.
  • Pediremos al paciente que cierre el puño
  • Procederemos a la punción de la vena elegida y colocaremos la bolsa sobre el peso para controlar cuando esté completada la extracción de los 400 cc.
  • Fijaremos la aguja con un trozo de esparadrapo
  • Después de la punción, aflojar el compresor.
  • Se le pedirá al paciente que si en algún momento se encuentra mal nos lo comunique.
  • El peso nos avisará cuando se rellene la bolsa de los 400 cc de sangre.
  • Pinzaremos la bolsa y procederemos a la retirada de la aguja.
  • Una vez retirada la aguja, el paciente deberá hacer presión en la zona de punción con el brazo estirado durante 2 o 3 minutos.
  • Posteriormente colocaremos un apósito o realizaremos un vendaje compresivo.
  • Dicha sangre extraída debe ser desechada.
  • Nos cercioraremos de que el paciente se encuentre correctamente.
  • Deberá permanecer sentado en observación unos 15-20 minutos.
  • Le ofreceremos un zumo.
  • Daremos una serie de recomendaciones para que el paciente siga a lo largo del día: deberá beber cantidad de líquidos adecuada para una buena reposición, se aconseja que no conduzca de camino a casa y que durante el resto del día no realice esfuerzos de gran intensidad.
  • Por último, levantaremos al paciente asegurándonos que se encuentra en perfectas condiciones y le daremos permiso para que pueda irse a su domicilio recordándole la fecha de la próxima extracción terapéutica.
  • Anotaremos todos los datos, incluido el nombre de la enfermera que realiza la técnica, así como la presencia de posibles complicaciones.

POSIBLES COMPLICACIONES

Este tipo de extracciones se suelen tolerar muy bien, de hecho se hacen millones todos los años a los donantes de sangre, por lo cual las reacciones severas son excepcionales. Estas pueden ser:

  • Hematomas en el lugar de la punción
  • Mareos
  • Descenso de la tensión arterial
  • Pérdida de conciencia o síncope 5

CONTRAINDICACIONES

Normalmente no hay contraindicaciones que impidan realizar dicha técnica, aunque hay en ciertos casos que no se suele utilizar porque suponen un riesgo para el paciente:

  • Algunos tipos de epilepsia
  • Problemas graves de corazón
  • Problemas graves de tensión arterial

CONCLUSIÓN

Tanto la práctica como las indicaciones de dicha técnica han cambiado a lo largo del tiempo, llegando a ser un tratamiento no farmacológico prescrito por personal médico y llevado a cabo por personal de Enfermería para diversas patologías hematológicas.

Como hemos visto, dicha técnica es muy sencilla y es el personal de Enfermería el que debe estar capacitado para llevarlo a cabo además de la correcta vigilancia y tratamiento adecuado del paciente, todo para evitar posibles complicaciones.

Pese a que se trate de un procedimiento sencillo y seguro, seremos nosotros los encargados de que el paciente se sienta tranquilo, presente bienestar y confort y no presente nerviosismo ni miedo de enfrentarse a dicho tratamiento. Esto lo conseguiremos mediante una correcta explicación del procedimiento y mostrándonos empáticos hacia el paciente.

BIBLIOGRAFÍA

  1. Chica Urbana [página en Internet. Madrid. [actualizado 8 Jun 2009; citado 11 Jul 2017]. Diez tratamientos médicos de la Edad Media. Disponible en: https://elblogdechicaurbana.wordpress.com/2009/06/08/diez-tratamientos-medicos-de-la-edad-media/
  2. MedlinePlus [página en Internet]. EEUU; c1997-2017 [actualizado 2 Ene 2017; citado 12 Jul 2017]. Policitemia Vera. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/000589.htm
  3. Ccm (salud.ccm.net) [página en Internet]. España [actualizado Junio 2016; citado 13 Jul 2017]. Tratamiento de la hemocromatosis: sangría o flebotomía. Disponible en: http://salud.ccm.net/faq/5663-tratamiento-de-la-hemocromatosis-sangria-o-flebotomia
  4. Hospital Universitario Virgen de las Nieves. Andalucía. [actualizado 8 Abr 2013; citado 12 Jul 2017]. Guía de procedimientos clínicos del servicio de transfusión. Disponible en:http://www.hvn.es/servicios_asistenciales/hematologia/ficheros/po_guia_procedimientos_clinicos_st_ed_02.pdf
  5. Donamaria N. Hemocromatosis primaria: Tratamiento con sangrías en Atención Primaria. [monografía en Internet]. Navarra: zonahospitalaria.com; [citada 13 Jul 2017]. Disponible en: http://www.zonahospitalaria.com/hemocromatosis-primaria-tratamiento-con-sangrias-en-atencion-primaria/