Las luxaciones subastragalinas o periastragalinas rara vez se ven en la práctica de emergencia y representan aproximadamente el 1% de todas las luxaciones y el 15% de todas las lesiones astrágalo. Su presentación abierta es aún más rara. La dislocación subastragalina se compone de una luxación de las articulaciones astrágalo-calcáneo y astrágalo-escafoidea. Pueden ser mediales o laterales en función de la posición del pie. Se presenta un caso de un varón de 39 años con una luxación medial abierta subastragalina tras caer desde una altura de un metro. La identificación y reducción precoz es fundamental para evitar el dolor y la limitación en el movimiento de la articulación subastragalina a largo plazo.