En tal sentido el uso y la aplicabilidad de un marco teórico en la práctica de Enfermería es realmente una necesidad, se puede observar que a pesar de que la primera respuesta de todas las informantes o su primera reacción fue decir que no se usan, luego lo perciben como una necesidad, una guía o una pauta para ejercer una práctica de calidad, reconociendo que no todas se aplican, pero que si se pueden utilizar debiendo ser una convicción el querer hacer uso de las teorías, independientemente de que alguien les diga que deben hacerlo, como un deber moral y ético. Si es cierto que hemos percibido la no utilización de las teorías de Enfermería en la práctica es importante saber que según la percepción de este grupo de enfermeras el uso de las teorías es concebido como una necesidad.

En cuanto a lo que piensan las enfermeras sobre las causas a las que ellas atribuyen el no usar las teorías en la práctica de Enfermería encontramos: que el sistema de trabajo se convierte en rutina, que depende del trabajo de los compañeros, o de que la gerencia no lo exige o no proporciona el apoyo organizacional necesario, que depende de las características del las instituciones de salud, la cantidad de enfermeras y sus pacientes, la inexistencia de material.

Todo esto no puede considerarse más que excusas para no darle utilidad al conocimiento que nos proporciona la teoría de Enfermería para perfeccionar nuestra práctica. Realmente no se requiere más que la convicción y el conocimiento que estamos frente a una realidad que es una persona con necesidades humanas que requiere de nuestros cuidados y que tales cuidados estarán dirigidos a lograr su capacidad de autocuidado, independencia o equilibrio demostrando el uso del conocimiento y fundamentando el cuidado en un marco teórico que se adapte a los requerimientos de las personas. Kérovac S., Pepin J., Ducharme F., Duquette A., Major F. (5) plantean que “no existe acuerdo sobre un enfoque teórico unitario, sino más bien existe pluralismo en las teorías y por el enriquecimiento que aporta la diversidad al conjunto de la disciplina ya que ninguna visión es lo bastante amplia para abarcar u orientar el conocimiento de la Enfermería en su totalidad”. Esto apoya las respuestas de las informantes que consideran que no todas las teorías se aplican, sin embargo es necesario tener conocimiento de la diversidad de teorías que se pueden aplicar según las condiciones y características de la persona a quien dirigimos nuestros cuidados.

Otro aspecto que resaltan las enfermeras es que las teorías son extranjeras y no se adaptan a nuestras necesidades, ciertamente las teorías han sido transferidas al continente latinoamericano procedentes de Norteamérica y el continente Europeo que por su carácter de continentes desarrollados y características diferentes dificultan la aplicabilidad en Latinoamérica. Sin embargo hasta ahora es lo que tenemos y no pierden vigencia, en este sentido es necesario promover las investigaciones que evalúen su aplicabilidad en la práctica de Enfermería de nuestros hospitales y comenzar a construir conocimiento acorde con nuestras características sanitarias.

En cuanto a cómo percibe este grupo de enfermeras la posibilidad de aplicación de las teorías de Enfermería en la práctica. Se obtiene: ven como una necesidad el apoyo organizacional, sin embargo lo primordial es que la enfermera comience a internalizar el conocimiento sobre las diferentes teorías y adoptar la que más se aplique a las condiciones de su práctica, a las personas que dirige su cuidado, humanizando el cuidado, los insumos son los mismos, la motivación debe ser intrínseca, ciertamente el trabajo debe ser en equipo y establecer metas claras es decir que la aplicabilidad de la teoría de Enfermería solo depende de la enfermera que quiere ejercer una práctica con profesionalismo, liderazgo autonomía y conocimiento.

Conclusión

La enfermera cuenta actualmente con una preparación de alto nivel, sin embargo no se ha apoderado de las características indispensables para que la disciplina de Enfermería se desarrolle equilibradamente con el resto de los profesionales y se espera que con sus logros y su interés por mejorar la prestación del servicio, proporcione los aportes necesarios para que se apropie de un marco teórico que fortalezca su práctica, y desarrolle características de autonomía, trabajo en equipo, liderazgo que le permitan desarrollar el poder que se requiere para integrarse con conocimiento a la práctica de mantener la salud y el cuidado de la vida en un sentido más amplio acorde con la demanda y las necesidades de nuestra sociedad.

En tal sentido, el uso de las teorías de Enfermería no depende de la organización, ni del número de enfermeras y de pacientes, ni de donde provienen las teorías solo dependerá de la percepción que tengan las enfermeras de la necesidad de uso de un marco teórico que fundamente y guie la práctica y de una concepción de la teoría en el conocimiento para su aplicabilidad en la práctica.

Referencias Bibliográficas:

1. GARCIA C. y Martínez María (2001). Historia de la Enfermería. Evolución Histórica del cuidado enfermero. Edit. Harcourt, S.A. España.
2. MARRINER A. (1994), Modelos y Teorias en Enfermeria, Tercera Edición, Edit. Mosby/Doyma. España.
3. HENDERSON V. (1994) La Naturaleza de la Enfermería. Reflexiones 25 años después. Edit. Interamericana – McGraw-Hill. España
4. CABELLO J. (2006) Modelos y teorías de Enfermería. Web. www.josecabello. com Consulta 11/11/2008.
5. KÉROVAC S., Pepin J., Ducharme F., Duquette A., Major F. (1996) El pensamiento enfermero. Editorial Masson. Barcelona.