Pacientes como el que inició esta línea de conversación (si se puede llamar conversación a un rebuzno) ayudan a crispar los ánimos en los hospitales y a que buenos profesionales de la Medicina y la Enfermería acaben "quemándose".

La única solución, igual cada paciente puede rechazar un centro sanitario y marcharse a otro, sería que los profesionales de la Salud pudiéramos rechazar a los pacientes maleducados y groseros y que los que no sigan las normas básicas de respeto se tuvieran que ir a otro centro.

SE RESERVA EL DERECHO DE ADMISIÓN, sería la forma de que la gente se cuidara un poco más de no maltratar a los que le rodean (no solo profesionales de la Salud, sino también los propios pacientes que les rodean y tienen que soportarles).