Pediatria. Enfermedad de Chagas. Importancia de diagnostico precoz y tratamiento oportuno.2
Tabla 1. Índices de Intensidad del cuadro clínico en 470 casos de Chagas Agudo.
Cuadro Clínico - Porcentaje
Formas Benignas - 75%
Formas de Mediana Gravedad - 19%
Formas Graves - 6%
Modificado de Yachellini P.y col. Enf. Chagas. Formas Presentación, 1480 casos. 2003.
Tabla 2. Puertas de entrada y Formas de presentación (nº 1480)
1. CON PUERTA DE ENTRADA APARENTE:
- Complejo Oftalmoganglionar - 83,3 %
- Chagoma de Inoculación - 2,3 %
2. SIN PUERTA DE ENTRADA APARENTE:
FORMAS TÍPICAS:
Chagoma Hematógeno – 1,1%
Lipochagoma – 3,8%
Edema generalizado – 4,5%
FORMAS ATÍPICAS:
Síndrome febril prolongado – 1,8%
Visceral (Hepatoesplenomegalia) – 1,8%
Cardíaca – 0,1%
Neurológica (Meningoencefalitis) – 0,9%
Anémica – 0,2%
Modificado de Yachellini P. y col. Enfermedad de Chagas. Formas Presentación, 1480 casos. 2003
Formas con puerta de entrada aparente.
Complejo oftalmoganglionar o signo de Romaña:
Aparece cuando la puerta de entrada es la conjuntiva y consiste en edema bipalpebral unilateral, con eritema, adenopatía satélite, conjuntivitis y dacrioadenitis. Con menor frecuencia puede haber exoftalmos, dacriocistitis, queratitis y edema de hemicara.
El edema es bipalpebral, aunque también puede ser unipalpebral, generalmente del párpado inferior e indoloro, con eritema rojo-violáceo. Puede asociarse a conjuntivitis no supurativa, edema de hemicara y exoftalmos. (4-5-7)
La adenopatía satélite es preauricular, de tamaño variable, siendo habitualmente adenopatías libres, indoloras, con la presencia de un ganglio dominante. Foto 3.

Foto 3. Complejo Oftalmoganglionar de Romaña
Chagoma de inoculación:
Se observa en las partes expuestas del cuerpo, como manos, cara, brazos y piernas.
Es de tamaño variable, una simple pápula o mácula, otras veces se asemeja al ántrax o un forúnculo; o simplemente a una zona pigmentada. Es poco doloroso o indoloro; de evolución tórpida, prolongada, acompañado de fiebre y síntomas generales.
Formas sin puerta de entrada aparente:
Chagoma hematógeno: tumoraciones únicas o múltiples, en nalgas, muslos o abdomen inferior. Son indoloras, de consistencia dura y no alteran el color de la piel. Suele observarse en Chagas postransfusional y en niños pequeños con formas graves. (5)
Lipochagoma geniano: es el chagoma que toma la bola adiposa de Bichat, dificultando la alimentación.
Edema: generalizado, de consistencia dura, elástica, renitente, no deja godet. Se ha observado en niños pequeños y en casos severos. (3-7)
Fiebre: persistente, de intensidad variable. Hiperpirexias de 39 – 40 ºC generalmente se producen en casos graves de niños menores a 2 años. (5-7-9)
Síndrome febril prolongado
Hepatomegalia y esplenomegalia: Es más frecuente en los casos graves.
Exantemas (esquizotripanides): exantema morbiliforme, urticariforme o macular con lesiones maculo papulosas rosadas o rojo-violáceas escasas y localizadas en tronco.
Aparato cardiovascular: La manifestación más frecuente es la taquicardia que no guarda relación con la fiebre (5-6-7). Las alteraciones electrocardiográficas más frecuentes son cambios de la onda T, bloqueos aurículo-ventriculares de primer grado, bajo voltaje del complejo QRS, alteraciones primarias de la repolarización ventricular y extrasistolia ventricular. Tabla 3.
Tabla 3. Alteraciones en el ECG en Chagas Agudo (Según Laranja y col., estudio sobre 180 enfermos)
Hallazgo ECG – Porcentaje
Prolongación del PR - 21.7%
Cambios onda T - 19.4%
Disminución voltaje de QRS - 8.3%
Prolongación intervalo QT - 7.2%
Cambios segmento ST - 4.4%
Anormalidades de onda P - 2.8%
Extrasistolia ventricular - 2.2%
Bloqueo de rama derecha - 1.1%
Ritmo nodal - 0.5%
E.C.G. Anormal - 43.3%
Mortales - 87.7%
No Mortales - 37.7%
Storino R. y col. Enfermedad de Chagas. 1994. 12:209-231