Al analizar el momento adecuado para el autoexamen (tabla 6) se pudo apreciar que de las 133 mujeres que se realizaban el autoexamen de mama 89 de ellas no tenían en cuenta el ciclo menstrual para realizarse el autoexamen mamario y lo practicaban en cualquier momento del ciclo con un 67.3%, 22 de ellas refirió que a mitad del ciclo para 12.6%, 12 de las pacientes refirieron que después de la menstruación para un 6.9% y solo 10 de ellas en el periodo premenstrual para un 5.7%, siendo el momento idóneo para realizarse el autoexamen de mamas después de la menstruación. Coincidiendo con el trabajo de Díaz JM, donde se hace referencia que las mujeres no tienen en cuenta el momento adecuado para la realización el autoexamen mamas (17).

Coinciden con nuestros resultados Moss y colaboradores (18) donde sólo el 7,1% de las estudiadas conocía el momento correcto, y el de Altamirano D. (19) con un 44,79% que no tuvo en cuenta el ciclo menstrual para realizarse el autoexamen.

Cuando sobreviene la menstruación la caída de los niveles de estrógeno y progesterona va seguida de descamación de las células epiteliales, atrofia del tejido conectivo intralobulillar, desaparición del edema del estroma y de una disminución del tamaño de los conductos y de los brotes glandulares (20), por lo que coincidimos con otros autores (21,22), que plantean que es precisamente después de la menstruación (alrededor del 7º día) el momento idóneo para realizar el autoexamen de mama, evitando que la nodularidad y edemas de la fase pre menstrual tiendan a confundir a la mujer que se auto explora.

Por todo lo anterior consideramos muy necesario explicar a las mujeres las razones por las que el momento correcto es después de la menstruación pues aún existe un grupo de mujeres que no lo practican en el momento adecuado.

A pesar de estos resultados podemos apreciar como a muchas mujeres no les agrada examinarse las mamas, a pesar de conocer el método, o solo lo hacen ante algún síntoma. Por un lado muchas tienen miedo examinarse las mamas y encontrarse un cáncer y por otro muchas piensan que no tienen la capacidad o destreza suficiente para detectar alguna alteración, por lo que consideramos que junto a la enseñanza del método, por una parte, debemos disipar temores ante las posibilidades de curación del cáncer gracias al descubrimiento precoz y por la otra, lograr que las mujeres confíen en ellas mismas como personas que sí son capaces de detectar lesiones mamarias con un buen entrenamiento, por lo que se recomienda que el médico luego de instruir a la paciente sobre el método, debe estar muy accesible a ella en los meses siguientes a sus primeros intentos de autoexploración para lograr lo antes expuesto.

Tabla 7. Distribución según la causa por la cual no se realizan el autoexamen mamario. 

En la tabla 7 se analizaron los motivos de las 42 mujeres que no se realizaron el autoexamen de mamas, se estimo que 16 casos con el 9.1% desconocían totalmente el tema, mientras 11 casos 6.4% no le interesa, 9 casos con porcentaje de 5.1% refirieron temor de encontrar alguna alteración y 6 casos con un 3.4% consideraron que para ellas no era necesario. A partir de estos resultados, se percibió que este grupo de mujeres entrevistadas tenían conocimientos insipientes en cuanto al autoexamen de mamas, haciendo necesario la implementación de medidas que promuevan su adhesión a esa práctica de manera segura y sistemática.

Tabla 8. Distribución de las mujeres según forma en que obtuvieron el conocimiento sobre el autoexamen de mamas. 

Al valorar las fuentes de información del método, en las 133 mujeres que se realizan el mismo, Obtuvimos que 68 mujeres que refieren haber obtenido los conocimientos a través de los medios de difusión masivos para un 51.1% observamos que 43 de ellas recibieron sus conocimientos a través del médico de atención primaria para un 32.3%, seguidamente por 12 mujeres que refieren haber obtenido los conocimientos a través de los familiares para un 9.1% y a través de una amiga 10 mujeres para un 7.5%.

Los resultados son satisfactorios pues evidencian la positiva influencia que está ejerciendo el Programa del Médico de la Comunidad en la promoción y prevención de salud.

Algunos autores en un estudio realizado en Hong Kong (23) encontraron que sólo el 40% de las mujeres tienen como fuente de información el médico. En otras investigaciones (24,25) señalan que la mayoría no lo había aprendido del profesional de la salud, aunque no aportan cifras.

El autor Iribar Z, expresa la necesidad de incrementar el trabajo educativo en la atención primaria en cuanto a prevención y promoción acerca de esta patología (24).

Villanueva (26), afirma en su investigación que las mujeres enseñadas por profesionales de la salud realizan la autoexploración más a menudo y eficientemente, por lo que consideramos que el médico de la comunidad, quien mantiene un contacto más estrecho con toda la población, es un pilar fundamental en la enseñanza de este importante método.

Tabla 9. Distribución de las pacientes según Importancia concedida al autoexamen de mama.