Perfil lipidico en escolares
Autor: Mariam S. Parra | Publicado:  7/11/2011 | Pediatria y Neonatologia , Endocrinologia y Nutricion , Articulos | |
Perfil lipidico en escolares .2

En este mismo orden de ideas, entre los años 1998 y 2000, Pérez, Parada y Millán (2002) realizaron un estudio sobre “Perfil lipídico en preescolares, escolares y adolescentes sanos en unidades educativas públicas y privadas” de Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui, donde se planteó, para cifras de triglicéridos mayores de 120 mg/dl en hembras, existe un mayor riesgo entre los 5 y 6 años para desarrollar patologías asociadas a trastornos lipídicos y en varones cifras de 115 mg/dl, pero en ellos el riesgo aumenta entre los 10-14 años . Además cuando el cociente LDL/HDL fue mayor de 1,82 para las hembras y de 1,96 para varones, estos últimos presentaron incremento de los valores entre los 10-14 años, lo que conlleva a un mayor riesgo de padecer alteraciones en el perfil lipídico en la segunda y tercera década de la vida.

Diversos estudios (Bunker, Ukoli, Okoro, Olomu, Kriska, Huston, Markovic, Kuller, 1996; Kaplan y Keil ,1993; Winkleby, Cubbin, Ahn y Kraemer, 1999) han identificado al nivel socioeconómico como otro aspecto importante que puede influir en la aparición de factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular, tanto en países desarrollados como en vías de desarrollo. Evidencias epidemiológicas indican que hay asociación inversa con la mortalidad y la morbilidad por enfermedad cardiovascular (Mannios, Dimitriu, Moschonis, Kocaoglu, Sur, Keskin, 2004). Más recientemente, Velásquez, Barón, Solano, Páez, Llovera y Portillo (2006) del Centro de Investigaciones en Nutrición (CEINUT) de la Universidad de Carabobo, Venezuela, evaluaron Perfil Lipídico en preescolares venezolanos según nivel socioeconómico, demostrando que el patrón lipídico observado en los preescolares de nivel socioeconómico bajo es un factor de riesgo para enfermedad cardiovascular.

Estudios actuales como el de Bogalusa (Berenson, Srinivasan, Bao, Newman, Tracy y Wattigney, 1987; Sathalur, Srinivasan, Myers, Berenson, 2002) y el Young Finns Study (MacMahan, Gidding, Viikari, Juonala, Kähönen, Hutri Kähönen, 2007; Raitakari, Juonala y Kahonen, 2003) han demostrado la relación existente entre los niveles de colesterol en la edad pediátrica y la adulta. Los niveles elevados de colesterol total y las lipoproteínas de baja densidad (LDL-c) tienden a mantenerse en un mismo percentil a lo largo del tiempo en un mismo individuo. De aquí surge la preocupación de detectar y tratar precozmente a niños con hipercolesterolemia, dado que si se modifican los factores de riesgo en las fases iniciales de la ateroesclerosis se puede experimentar regresión de la placa pre-ateromatosa o detener el proceso (Merino, 2007). El estudio de Bogalusa (Berenson et al, 1987; Sathalur et al, 2002) también demostró que los hijos de personas con enfermedad de arterias coronarias tienen mayor frecuencia de obesidad, elevados niveles de colesterol, triglicéridos, glucosa sanguínea e insulina. Por otro lado, Romero, Campollo, Celis de la Rosa, Vásquez, Castro y Cruz (2007) estudiaron los “Factores de riesgo de Dislipidemia en niños y adolescentes con obesidad” concluyendo que, la obesidad en niños y adolescentes se asocia a riesgo elevado de presentar dislipidemias sobre todo en las mujeres.

Moura, Mello, Mellin y Bueno (2000) estudiaron el “Perfil lipídico en escolares de Campinas, SP, Brasil”, en escolares de 7-14 años de edad y la prevalencia de hipercolesterolemia, demostrando que esta debe ser considerada como un problema de salud pública en Brasil, por lo que se debe tomar en cuenta la prevención pediátrica de enfermedades cardiovasculares.

Igualmente, Sánchez-Bayle, Sánchez, Asensio, Ruiz, Baeza y Morales (2005) realizaron un “Seguimiento de 5 años del perfil lipídico en los niños”. Estudio “Rivas-Vaciamadrid”. Estudiaron niños entre 6 y 11 años a los cuales se les midió el perfil lipídico y concluyeron que existe una correlación significativa entre estos valores a los 6 y 11 años, siendo el índice aterogénico el que presenta una mejor correlación.

Según el estudio INTERHEART, uno de los nueve factores de riesgo coronario modificables es la dislipidemia, expresada como niveles de lípidos sanguíneos alterados, lo que justifica la determinación del perfil lipídico en los escolares de la Escuela B.B. Batalla de Bomboná e investigar alteraciones del perfil lipídico con el fin de informar los riesgos y prevenir enfermedades cardiovasculares.

Los niveles alterados de lípidos séricos en la infancia tienden a persistir en la adolescencia y en la adultez. En este sentido se recomienda la realización del perfil lipídico desde la infancia (etapa escolar y adolescencia) ya que el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares puede revertirse con más facilidad en esta época de la vida (Ablam et al, 2005). Diversas evidencias científicas señalan que la ateroesclerosis es un proceso que comienza en la infancia. La presencia de altas concentraciones plasmáticas de colesterol total (CT), triglicéridos (TG), lipoproteínas de baja densidad (LDL-C), lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL-C) y una baja concentración de lipoproteínas de alta densidad (HDL-C); muchas veces desde la niñez, se correlacionan con la magnitud de las lesiones en adolescentes y adultos jóvenes (Carneiro, Bosch e Izquierdo, 2001; El-Hazmi y Warsy 2001; National Cholesterol Education Program, 1991). El valor del colesterol total por sí solo no permite realizar predicciones sobre el desarrollo de procesos ateroescleróticos; sin embargo, el análisis de las relaciones de riesgo (CT/HDL-C y LDL-C/HDL-C), da una visión más clara del riesgo de enfermedad cardiovascular. A mayor valor de la relación, mayor es el riesgo de desarrollar enfermedad ateroesclerótica (Gutiérrez-Fisac, 1998). Los cocientes CT/HDL-C y LDL-C/HDL-C son potentes predictores del riesgo coronario, más que el CT, HDL o LDL en forma individual (Pintó y Rosb, 2000).

METODOLOGÍA

Se trata de un estudio de diseño no experimental, de campo, nivel descriptivo y corte transversal que se llevó a cabo en escolares de 4to, 5to y 6to grado de la “Escuela B.B. Batalla de Bomboná” entre los meses de Junio-Julio de 2008. La población la conformaron todos los escolares de 4to, 5to y 6to grado, con una muestra poblacional intencional, conformada por 45 escolares que cumplían con los criterios de inclusión (escolares de 10-13 años, con antecedentes familiares de enfermedades crónicas no transmisibles y que firmaran el consentimiento informado). A todos los escolares seleccionados se les realizó una Historia Clínica Nutricional, para obtener datos sobre antecedentes familiares predisponentes (hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad y dislipidemias) evaluación antropométrica, estrato socioeconómico y evaluación bioquímica.

TÉCNICAS DE RECOLECCIÓN DE DATOS: Por medio de Cuestionarios: ficha personal, Graffar-Mendez Castellano; Mediciones antropométricas y Mediciones bioquímicas.

RESULTADOS

Se estudiaron 45 escolares, siendo 31 hembras (69%) y 14 varones (31%). La media grupal de edad fue 11,09 +/- 0,99, siendo el rango mayor 10 años con 35% (Tabla 3). De los escolares el 93 % presentó antecedentes familiares de hipertensión arterial, 67% de diabetes mellitus, 40% dislipidemias y 31% obesidad (Tabla 1).

TABLA Nº 1: Frecuencia de antecedentes familiares de los escolares de 4to a 6to grado de la Escuela B.B. Batalla de Bomboná, Naguanagua, Estado Carabobo, periodo escolar 2008-2009 

perfil_lipidico_escolares/antecedentes_personales

En cuanto al nivel socioeconómico según Graffar modificado por Méndez-Castellanos, 40% pertenece a la clase obrera, 29% a la clase media baja, el 22% a la clase pobreza crítica, el 9% a la clase media alta y ninguno pertenece a la clase alta (Tabla 2).

TABLA Nº 2: Nivel socioeconómico según de los escolares de 4to a 6to grado con criterios de inclusión de la Escuela B.B. Batalla de Bomboná, Naguanagua, Estado Carabobo periodo escolar 2008-2009 

perfil_lipidico_escolares/nivel_socioeconomico

Al estudiar niveles de colesterol total, HDL-C, LDL-C, triglicéridos, relación Colesterol/HDL-C y relación LDL-C/HDL-C se evidenció que en ninguna de las variables estudiadas de acuerdo al sexo, hubo diferencias significativas (T student p > 0,05 y Mann-Whitney p > 0,05) (Tabla 3).

Tabla Nº 3: Cuadro resumen de la caracterización de las variables estudiadas por media grupal y de acuerdo al sexo (n=45) (X+DE) de los escolares de 4to a 6to de la Escuela B.B. Batalla de Bomboná, Naguanagua, Estado Carabobo, periodo escolar 2008-2009. 

perfil_lipidico_escolares/caracterizacion_segun_sexo


Revista Electronica de PortalesMedicos.com
INICIO - NOVEDADES - ÚLTIMO NÚMERO - ESPECIALIDADES - INFORMACIÓN AUTORES
© PortalesMedicos, S.L.
PortadaAcerca deAviso LegalPolítica de PrivacidadCookiesPublicidadContactar