Niño de 6 años que ingiere de forma accidental una cantidad indeterminada de lejía, apareciendo de forma inmediata sialorrea y dolor centrotorácico. Es remitido de forma urgente a su Hospital de referencia.
La ingestión de productos cáusticos sigue siendo un grave problema y la prevención de estos accidentes es esencial para evitar lesiones esofágicas. La práctica totalidad de las ingestiones en niños son de carácter accidental, al contrario de lo que suele suceder en los adultos, y están producidas por dos tipos de sustancias: los ácidos, y los álcalis.