Hola Eva,
comparto lo que decís. Yo, si bien tengo otros sìntomas (rabia, furia, estrés, sensación de que un fuego me sube desde el estómago) también sufro muchísimo el calor. En especial el calor derivado del cambio climático. Aquí donde vivo, en Buenos Aires, el cambio se nota muchísimo: ya no hay estaciones, y en pleno invierno la temperatura puede llegar hasta los 34 grados (como sucedió el agosto pasado). Todo esto me afecta sobremanera, hasta el punto de suspender actividades y encerrarme en mi casa. Y hasta que no rompo algo no me calmo (temporariamente, claro).
También como vos he probado distintas terapias, pero a mí pareciera que no hay nada que me calme. Ahora estoy tomando rivotril de 0,50. No sé si la solución pasa por los medicamentos, pero realmente necesito curarme de esto cuanto antes. Se viene el verano y, si ya padecí el calor en pleno invierno, no quiero imaginarme lo q sufriré en el verano...
Saludos