La parada cardiaca extrahospitalaria (PCEH) es un importante problema de salud pública por su incidencia y alta mortalidad. Por ello, en los últimos años, se ha tratado de optimizar la respuesta a la PCEH desarrollando la denominada “cadena de supervivencia”.
El seguimiento secuencial de sus eslabones resulta crucial para mejorar la supervivencia y disminuir las secuelas derivadas de este tipo de eventos.