Las causas posibles de este problema pueden ser: hipertiroidismo, infecciones bacterianas o virales o algunos fármacos. Por ejemplo: fármacos antidepresivos. En los diabéticos, la hipoglucemia puede ser la causa de la sensación de sofoco. También puede existir sudoración nocturna debido a un descenso en el nivel de testosterona (andopausia) o un elevado nivel de cortisol (por estrés). Además tenemos la Apnea del sueño provocada por rinitis alergicas que tranquen la respiración y el más dañino por Linfomas(glandulas que se alteran) también conocida como enfermedad de Hodgkin.
En todo caso no hay que descuidarse e ir a los médicos pertinentes hasta conseguir la causa.