A mí me la daban ya de niña, para curar la tos, las hojas cortadas a lo largo, maceradas con azúcar y unas gotas de aguardiente. Lo curioso es que estoy en el extremo N.O. de España, y se cultiva en los tejados de pizarra de las casas de campo. También he estado buscando mucho y no la encuentro en ningún libro de medicinales.- Reme