La cirrosis hepática es una enfermedad crónica, a saber, difusa e irreversible del hígado, que constituye la fase final de procesos de etiología bien variante.
Se caracteriza por una distorsión de la arquitectura vascular del hígado debida a la sustitución de su estructura normal por nódulos de regeneración y fibrosis.
La enfermedad normalmente puede mantenerse compensada durante largos períodos de tiempo y carecer de expresividad clínica.
Al cabo de un tiempo variable aparecen sus manifestaciones clínicas, que pueden estar producidas por insuficiencia hepatocelular o por una hipertensión portal causada por la alteración de la vascularización intrahepático.
Las causas más frecuentes de la cirrosis hepática en el adulto son los virus de la hepatitis B (VHB) y de la hepatitis C (VHC) y el consumo excesivo del alcohol, que constituyen la etiología de más del 85% de los casos.
La importancia relativa de estos agentes varía según las áreas geográficas.
Causas menos frecuentes de cirrosis son la obstrucción biliar crónica y las alteraciones congénitas del metabolismo del hierro (hemocromatosis) y del cobre (enfermedad de Wilson).
El desarrollo de cirrosis después de una infección crónica, a saber, por VHB o por el VHC, ocurre en aproximadamente el 25% de los casos.

Has de saber no todo esta perdido ni mucho menos, la madre naturaleza siempre esta dispuesta para ayudar a los que acuden a ella.

Para una información más completa póngase en contacto con nosotros. sin compromiso alguno. en www.binipatia.com ó al 650273886 o al 626868980