a ver, chic@s, que no cunda el pánico...

a cualquiera nos puede dar un infarto en cualquier momento, teniendo el corazón enfermo o el corazón sano. Les ocurre a viejecitos muy viejecitos, y a jóvenes deportistas. Pero no podemos vivir pensando que vamos a morir en cualquier momento y de repente, porque eso no es vida y lo único que conseguiremos será sufrir y hacer sufrir a quienes nos aman.

por favor, vamos a quedarnos con el mensaje del arritmologo de sandra y el de todos los cardiólogos que nos han visto:

en corazón sin cardiopatías, las extras son benignas.

y a vivir!!