Llevo unos días estupendos, sabeis? y no es que tenga menos extras, sino que paso un poco y me las tomo con más tranquilidad. He cambiado un poco el chip y creo que el quid de la cuestión está en aprender a vivir con ésto. Ya no me amargo la vida desde la primera hora de la mañana, cuando empiezo a sentirlas. Ya no pienso que mañana será igual y pasado igual y asi siempre. Estoy empezando a aceptar que mi corazón late así, igual que mis ojos son marrones o mi piel blanca. No es agradable sentir ésto, pero se puede vivir con ello, intentando no dar cabida al miedo, que es el peor enemigo.

en fin, quería compartir todo esto con el foro, por si os sirve. Yo voy a intentar que esta filosofía me dure, al menos, no vivo asustada y estoy empezando a recuperar mi alegría habitual.

me voy a andar. un beso,

santy