Supercurso de actualizacion en los aspectos farmacologicos de las drogas tuberculostaticas.2
Isoniazida.

Su actividad es específica frente a las micobacterias tuberculosas, careciendo de acción contra otros microorganismos.
Se comporta como altamente bactericida contra los bacilos en fase de crecimiento rápido, tanto extracelulares como intracelulares; en cambio, es bacteriostática contra los bacilos en estado de reposo.
Continúa siendo el mejor compuesto antimicobacteriano, analizado de manera individual, por su índice eficacia/riesgo, bajo costo, facilidad de administración y aceptación por parte de los pacientes; por ello constituye la base de los diversos regímenes de administración.
Por la frecuencia con que pueden aparecer resistencias a la isoniazida, nunca se administra sola.
La isoniazida afecta numerosas funciones biológicas del bacilo, pero su acción primaria es la de inhibir la síntesis de los ácidos micólicos (son componentes lipídicos específicos e importantes de las membranas de las micobacterias).
Se absorbe muy bien por vía oral; los valores de biodisponibilidad son hasta del 90%, pero puede haber un fenómeno de primer paso; el tmáx es de 1-2 horas. Excepcionalmente y en casos críticos se puede administrar por vía parenteral. Apenas se une a proteínas y difunde con facilidad a todos los tejidos, material caseoso, líquidos ascítico y pleural; en el líquido cefalorraquídeo (LCR), la concentración es el 20% de la plasmática. La isoniazida es metabolizada casi en su totalidad en el hígado.
La isoniazida puede considerarse un fármaco poco tóxico y ello ha contribuido a su actual posición en la terapéutica antituberculosa. Es el fármaco de elección en el tratamiento y la profilaxis de la tuberculosis, en todas sus formas.
Rifampicina.

Es un antibiótico de amplio espectro ya que inhibe el crecimiento de numerosas micobacterias, tanto típicas como atípicas, y de bacterias grampositivas y gramnegativas. Es bactericida.
Aparece resistencia con rapidez in vitro e in vivo tanto en micobacterias como en otras bacterias (Neisseria meningitidis), en particular si se administra sola; disminuye cuando se administra en asociación con isoniazida, etambutol, estreptomicina u otros fármacos antimicobacterianos.
La rifampicina por vía oral tiene una biodisponibilidad superior al 90%. El alimento interfiere en la velocidad y la intensidad de la absorción. Difunde libremente a los tejidos y líquidos corporales, atraviesa la placenta y la barrera hematoencefálica (BHE).
En el intestino, la rifampicina entra en la circulación enterohepática.
La probenecida reduce su excreción al bloquear la captación hepática. A su vez, la rifampicina acelera el metabolismo de otros fármacos por inducción enzimática.
Puede producir inicialmente algunas molestias digestivas, erupción cutánea, algias musculares y articulares y calambres en las extremidades, pero la reacción más frecuente e importante es de carácter hepático.
Interacciones de la rifampicina
La rifampicina acelera el metabolismo de los esteroides corticales, anticonceptivos esteroideos, anticoagulantes orales, hipoglucemiantes orales, metadona, digitoxina, quinidina, propranolol, ketoconazol; en consecuencia, disminuye la actividad de estos fármacos a menos que se aumenten sus dosis.
Está indicada en la tuberculosis, en ciertas micobacteriosis atípicas y en la lepra. En asociación con vancomicina se puede emplear en infecciones por Estafilococo aureus resistentes a meticilina y en infecciones por Legionella, en asociación con eritromicina.
Etambutol.

El etambutol es un fármaco sintético que actúa exclusivamente sobre las micobacterias en fase de crecimiento: Mycobacterium tuberculosis, Mycobacterium bovis, la mayoría de las cepas de Mycobacterium kansasii.
Su acción es bacteriostática, incluso sobre cepas resistentes a la isoniazida y la rifampicina.
Se absorbe por vía oral con una biodisponibilidad de casi el 80% y un tmáx de 2-4 horas; 15 mg/kg proporcionan una concentración plasmática de 5 mg/kg. Se fija a proteínas en el 40% y se excreta principalmente por el riñón.
A las dosis recomendadas es muy poco tóxico; en ocasiones puede producir algunas reacciones de hipersensibilidad, con fiebre, artralgia, erupciones cutáneas y prurito, molestias gastrointestinales, cefalea, mareo, desorientación y alucinaciones.
Aplicaciones terapéuticas del etambutol.
En el tratamiento de tuberculosis y otras infecciones micobacterianas, de forma asociada.