Cuadro II. Características conductuales del estilo de vida en trabajadores del primer nivel de atención del ISEA, México, 2008



En alusión a la situación conyugal, el 57.3% refirió estar casado, 31.5% soltero, 3.2% viudo y el 8.1% divorciado. No se presentó correlación entre éste contexto y la incidencia de las toxicomanías estudiadas. El ingreso económico de la población tampoco presentó correlación al respecto. De igual forma, nula correlación entre el grado de instrucción académica, situación conyugal y duración de jornada laboral versus patrones de actividad física, que revelan un sedentarismo evidente entre la población, sin importar en qué contexto se desarrollen.
La caracterización antropométrica fue conformada de forma desalentadora por las variables índice de masa corporal (IMC) (cuadro III y Figura II) y AC (Figura III), que revelan una muy importante prevalencia de trastornos de la composición corporal; siendo los varones quienes presentan las incidencias más elevadas en sobrepeso y obesidad (Sp y Ob) y exceso de AC.
Cuadro III. Caracterización antropométrica por IMC

Figura II. Distribución global por índice de masa corporal (IMC): Normalidad vs. Sobrepeso y Obesidad

Esta dualidad de trastornos de sobre nutrición permaneció independientemente del género, situación conyugal, instrucción académica e ingreso económico de los sujetos de estudio. En tanto que a pesar de que el 84.67% de la población desarrolla su comida principal en casa, no fue identificada consistencia antropométrica que pudiese proponer la conceptualización de esta variable como factor de protección contra el Sb y Ob.
Figura III. Adiposidad corporal

En lo que respecta al análisis glucémico, las cifras presentadas promediaron 98.02 mg/dl (en rango de 67 a 164), cabe la mención que con un nivel de alteración glucémica en ayuno (28) se identificaron 26 sujetos (21%); 7 de los cuales (5.6%) llegaron a presentar cifras superiores a los 126 mg/dl.