Factores de riesgo en el ictus
Autor: Sonia García Galdón | Publicado:  18/04/2012 | Medicina Preventiva y Salud Publica , Neurologia , Articulos | |
Factores de riesgo en el ictus .3

J) Cardiopatías embolígenas

La fibrilación auricular no valvular es la causa más frecuente de ictus de origen cardioembólico. En los pacientes con fibrilación auricular los anticoagulantes tienen mayor eficacia que los antiagregantes para prevenir los ictus, aunque también tienen más complicaciones hemorrágicas. Se recomienda tratamiento indefinido con anticoagulantes orales (INR: 2-3) para la prevención primaria de ictus en los pacientes con fibrilación auricular de riesgo alto (pacientes >75 años, con diabetes, hipertensión o enfermedad vascular, pacientes con insuficiencia cardiaca o disfunción ventricular, y pacientes con fenómenos embólicos previos). En los pacientes con riesgo moderado se puede optar por la anticoagulación o la antiagregación. Finalmente, en los pacientes con riesgo bajo (<65 años, sin historia de embolismo y sin otro factor de riesgo) se recomienda tratamiento antiagregante. Cuando existan contraindicaciones formales a los anticoagulantes se recurrirá a los antiagregantes.

Cada vez es menos frecuente que el infarto de miocardio se complique con un ictus debido a la aplicación de tratamientos agresivos, que incluyen pautas de doble antiagregación (aspirina y clopidogrel). Se debe considerar el tratamiento con anticoagulantes orales en los pacientes que han sufrido un infarto de miocardio con elevación del segmento ST asociado a una discinesia o a un aneurisma ventricular.

Las cardiopatías con fracción de eyección del ventrículo izquierdo por debajo del 30% se asocian a un riesgo incrementado de ictus, que puede reducirse con antiagregantes o anticoagulantes.

Las prótesis valvulares de tipo mecánico conllevan un riesgo muy elevado de trombosis y embolias, que obliga a una anticoagulación indefinida, con un intervalo de INR que depende del tipo de válvula y de las características individuales del paciente. Cuando el riesgo de embolia es alto se recomienda añadir antiagregantes al tratamiento anticoagulante. Las prótesis valvulares de tipo biológico tienen un riesgo menor. Tras su implantación, se recomienda pautar durante tres meses anticoagulantes seguidos de antiagregantes.

K) Estenosis carotídea asintomática

En ocasiones se descubre una estenosis de la arteria carótida interna en pacientes que no han experimentado ningún ictus isquémico o AIT. Estos pacientes tienen un riesgo de ictus que se sitúa entre el 2 y el 3% anual, y que puede llegar hasta el 5% anual para las estenosis más graves. Los ensayos clínicos han demostrado que en los pacientes asintomáticos con estenosis carotídeas significativas (>70%) la endarterectomía carótida tiene una eficacia superior al tratamiento médico. No obstante, el beneficio absoluto es bajo. La eficacia es mayor en los varones y en los pacientes con una esperanza de vida más larga. Sólo debe plantearse la intervención si el equipo quirúrgico acredita una morbimortalidad perioperatoria inferior al 3%. La decisión debe tomarse conjuntamente con el paciente, teniendo en cuenta sus factores individuales y los posibles riesgos y beneficios. Se recomienda mantener tratamiento con antiagregantes después de la endarterectomía, así como en los pacientes que no son subsidiarios de intervención.

L) Aneurismas cerebrales íntegros

La principal causa de HSA (hemorragia subaracnoidea) es la rotura de un aneurisma intracraneal. La prevalencia de aneurismas en los vasos cerebrales se estima entre el 1 y el 6% de la población, con un riesgo medio anual de rotura del 0,7%. Para reducir el riesgo de rotura, en los pacientes con un aneurisma intracerebral íntegro se recomienda mantener las cifras de presión arterial dentro de rangos normales, y evitar el consumo de tabaco, alcohol o sustancias simpaticomiméticas.

Además, en los aneurismas de diámetro igual o superior a 7 mm se debe considerar la intervención del saco aneurismático (por cirugía o procedimiento endovascular), sobre todo si la localización es posterior. En caso de seguir una conducta conservadora, se recomienda la monitorización estricta de los cambios de tamaño del aneurisma

M) Ejercicio físico

La práctica de ejercicio físico se asocia con un menor riesgo de episodios vasculares, incluyendo el ictus. Se recomienda que todas las personas, dentro de sus posibilidades, realicen ejercicio físico regular durante un mínimo de 30 minutos al día.

Además de los factores anteriores, que son modificables, hay otros sujetos con factores de riesgo no modificables que tienen una posibilidad mayor de padecer un ictus y son los que más se pueden beneficiar de un control riguroso de los factores. La edad es el principal factor de riesgo no modificable de ictus. La presencia de antecedentes familiares también se asocia con un riesgo elevado de ictus.

Objetivos Específicos de prevención primaria

• 1.1. Detectar precozmente, incluir en programas de seguimiento y controlar a los pacientes de riesgo (hipertensos, diabéticos y dislipémicos).
• 1.2. Invertir la tendencia actual de crecimiento de la prevalencia de obesidad en la población.
• 1.3. Disminuir la prevalencia de consumo de tabaco en la población adulta (> 15 años) en España (o cualquier Comunidad Autónoma) hasta el 28% (hombres 35% y mujeres 25%).
• 1.4. Aumentar el porcentaje de población que realiza actividad física.
• 1.5. Los pacientes con cardiopatías embolígenas de alto riesgo recibirán tratamiento anticoagulante o antiagregante.

IMPORTANCIA DE LA ENFERMERÍA.

Dadas las causas modificables de un ictus, la enfermera junto al médico de atención primaria tienen la llave junto a los especialistas nutricionales y endocrinos de poner freno a esta enfermedad cerebro vascular tan mortal y destructora.

El personal de enfermería representa un papel muy importante en el diagnostico, educación y prevención de la diabetes, la hipertensión, el alcoholismo y demás causas modificables de un ictus. Por eso la enfermera y medico de atención primaria deberá enfocar la educación sanitaria hacia el paciente en:

• Controlar la presión arterial de forma periódica.
• Realizar controles para descubrir y tratar posibles patologías cardíacas.
• Realizar controles de glucemia y colesterol.
• Invitar al paciente al ejercicio físico y evitar el exceso de peso.

CONCLUSIONES.

He llegado a la conclusión de que el papel más importante para la prevención del ictus, es el médico de atención primaria y enfermeras. Más información a la población poniendo sobre la mesa el peligro real que conllevan los factores de riesgo

Hay varias formas de evitar un ACV. Las tres más importantes son la disminución del tabaco, hacer actividad física moderada, esto es, combatir el sedentarismo y llevar una sana alimentación.

RESULTADO.

Se evidencia un bajo nivel de conocimiento, la necesidad de llevar a cabo campañas informativas generales y específicas, enseñando a detectar los signos y síntomas de alarma. A nivel de profesionales sanitarios, hemos detectado, la necesidad de mejorar nuestros conocimientos en dicha materia. Actuando tanto en los factores de riesgo, como detectando precozmente posibles complicaciones, en la fase aguda.

BIBLIOGRAFÍA.

 Sánchez León M. Enfermedad cerebrovascular. Epidemiología. En: Enfermedades cerebrovasculares. La Habana: Ed. Pro Salute; 1999. p.5-7.
 Publicación médica de neurología. Sociedad Española de Neurología. "Accidente Cerebrovascular: Esperanza en la Investigación", NINDS. Diciembre 2000
 Matthias Endres, Peter U. Heuschmann, Ulrich Laufs y Antoine M. Hakim. Eur Heart J 2011 32: 545-552.
 Plan Director de la Enfermedad Vascular Cerebral en Cataluña. Agencia de Evaluación de Tecnología e Investigación Médicas de Cataluña (AATRM) Guía de práctica clínica sobre el ictus. Departamento de Salud, Generalitat de Catalunya. 2005 (actualizada 2007).
 Acuerdo para el uso del término ICTUS: Díez-Tejedor E (ed.). Guía para el diagnóstco y tratamiento del ictus. Guías oficiales de la Sociedad Española de Neurología. Barcelona: Prous Science, 2006.
 BUERGO ZUAZNABAR, Miguel A. Programa Nacional de Prevención y Control de la enfermedad cerebrovascular. Rev Cubana Invest Bioméd [online]. 2001, vol.20, n.4 [citado 2011-06-03], pp. 247-248 . Disponible en:
. ISSN 0864-0300.


Revista Electronica de PortalesMedicos.com
INICIO - NOVEDADES - ÚLTIMO NÚMERO - ESPECIALIDADES - INFORMACIÓN AUTORES
© PortalesMedicos, S.L.
PortadaAcerca deAviso LegalPolítica de PrivacidadCookiesPublicidadContactar