Tu síndrome Wolff-Parkinson-White sí era un problema. Una vez eliminado, supongo que por medio de la ablación, las extras que padeces son pecata minuta comparado con aquéllo.
Además, has sido capaz de dejar de fumar, lo que demuestra una ferrea voluntad que es el ingrediente necesario para poner a las extras donde tienen que estar: el cajón del olvido.
Por si fuera poco, te sientes mejor cuando estás activa, así que tienes abierta la mejor de las vías para desintoxicarte del tabaco definitivamente y mantener un corazón sano y fuerte: el ejercicio físico.
Sobre la utilidad del Sumial y otros betabloqueantes, podrás encontrar en el foro multitud de opiniones al respecto, pero todas tienen un factor común: ninguno te quitará las extras. Es posible que las mitiguen un poco, pero seguirán estando ahí, sobre todo si te obsesionas con ellas.
Por lo general, los que padecemos extras tenemos nuestro enemigo dentro y no precisamente en el corazón, sino dos palmos más arriba, en pleno cerebro. Es ahí donde hay que poner el énfasis en la lucha contra las extras, pues es donde obtendremos los mejores resultados, ya sea disminuyéndolas, ya sea teniendo la fortaleza mental suficiente para pasar de ellas.
Ánimo y adelante.

Un saludo,

Carlos.