Hola, soy una chica de 32 años y tengo pareja estable desde hace casi 10. La verdad es que le quiero y no deseo separarme de él, en cuanto al sexo, evidentemente ya no es como al principio, pero yo diría que no nos va mal del todo. Sin embargo siento un deseo irrefrenable de mantener relaciones con nuevas parejas, de hecho, las veces que se me ha presentado la ocasión (que no han sido pocas) no he sido capaz de resistirme (siempre tomando precauciones por supuesto). ¿Es esto una conducta normal? ¿Significa esto que no amo de verdad a mi chico y que debo dejarle a pesar de no querer hacerlo? ¿Puede que se trate de necesidad de reafirmación o de adicción al placer que procura?
Gracias.