Aunque tardía mi respuesta, creo será útil para casos semejantes.

Nunca recurrir a la circuncisión, salvo casos especiales como serían fimosis rebeldes a los ejercicios o a prepucios demasiado largos.

Tu hijo está en pleno desarrollo. Con los ejercicios que le aconsejaste y al crecer su pene, por sí solo procurará salirse de su capucha en alguna de las erecciones nocturnas o en las mañaneras.

Habrá que advertirle que cuando eso suceda, lave de inmediato el glande, que seguramente estará cubierto de esmegma y evite tocarlo, ya que está muy sensible.

Acostumbrarlo a bajar su prepucio al bañarse, como lo hacen sus compañeros, y siempre al orinar dejarlo descubierto. Seguramente al crecer su pene, cuando se pare, su glande quedará pelado y con el roce de su ropa, pierda sensibilidad.