Soy varón, de 43 años, y desde hace aproximadamente 8 ó 9 años estoy diagnosticado de glomerulomefritis de cambios mínimos. Comencé un tratamiento tomando un medicamento, CARASEL, que me fue bastante bien. Como desapareció en los análisis la proteinuria (era lo único que me hizo conocer de mi enfermedad, pues jamás tuve, ni he tenido después ningún otro síntoma) dejé de tomar aquella medicación. Al cabo de 2 o 3 de años volví a hacerme unos análisis y se detectaron otra vez niveles de proteinuria que iban incrementándose de uno a otro. Acudí de nuevo al médico (esta vez al médico de familia) y me ha recetado KARVEA 150 mg. Conseguí, primero frenar y luego reducir hasta haber hecho prácticamente desaparecer los niveles de proteinuria (los de creatinina no los he tenido nunca elevados).
Bueno, cuento esto para alentar a quienes puedan leer este mensaje a fin de que no dejen sus tratamientos pese a que, como afortunadamente en mi caso, no padezcan ningún síntoma externo de la enfermadad.
Un saludo