Yo también he pasado por eso, y lo acabé dejando. He pasado por muchas fases vegetarianas, desde la vegana, hasta lo tuyo, que no sabría como definirlo, me daba cosa comer animales que se parecían tanto a nosotros.

Por experiencia no es nada bueno, todavía a veces me cuesta asumir que no tenga más remdio que comerme un simpático cerdo, y a veces de verdad que me afecta.

Cuando al fin volvía a comer carne roja, volvía sentirme bien, no sabes lo que he adelgazado atiborrándome de chuleteas de cerdo, de las de aguja y cabecero que son las más tiernas porque tienen mucha veta blanca. Es que después de un año a base de pescado y pollo, estaba desnutrida, si miras por internet, verás que las propiedades de la carne roja y blanca son my diferentes. La carne roja tiene maña fama, pero la realidad es que alimenta muchísimo.

Yo además me emparanoyaba evitando la grasa, bueno, pues cuando empecé a atiborrarme de carne roja con betas blancas no veas lo que adelgacé.