Hipertension arterial. Revision bibliografica
Autor: Dra. Yenys Góngora Ruiz | Publicado:  14/09/2009 | Cardiologia , Nefrologia , Medicina Interna , Medicina Familiar y Atencion Primaria | |
Hipertension arterial. Revision bibliografica.5

Otras medidas complementarias a los cambios en el estilo de vida pueden ser adoptadas en pacientes hipertensos con diabetes mellitus o hiperlipidemia-dislipidemia.

 

Es importante tener en cuenta que estos cambios en el estilo de vida tienen un efecto sinergístico. El cumplimiento de una de ellas no es razón suficiente para dejar de lado las demás recomendaciones. Así, una dieta restringida en sal asociada con el cumplimiento de las otras recomendaciones tiene un resultado aditivo en la reducción de los valores tensionales.

 

Los principales retos en el manejo de la enfermedad hipertensiva, hoy en día, son lograr que un mayor número de personas sean tratados más efectivamente y alcanzar las cifras óptimas de tensión arterial sin compromiso del bienestar individual, debido a que los eventos adversos son los principales responsables para el cumplimiento cabal del tratamiento.

 

Los beneficios de la terapia antihipertensiva pueden optimizarse: (45)

 

-       prestando mayor atención a la tensión arterial sistólica (TAS).

-       alcanzando cifras tensionales diastólicas menores a 90 mmHg (~ 85 mmHg).

-       con un mayor control ambulatorio de la presión arterial (MAPA).

-       corrigiendo o eliminando otros factores concomitantes de riesgo cardiovascular.

-       empleando drogas con mayor propiedad protectora de los órganos blanco:

 

·         Propiedades antiaterogénicas.

·         Reversión de la HVI y del remodelado vascular.

·         Efecto antioxidante.

·         Reversión de la disfunción endotelial.

·         Asociar aspirina.

 

La protección vascular debe ser un objetivo primordial en el tratamiento de la hipertensión arterial, a objeto de evitar o retrasar las consecuencias clínicas determinadas por la injuria vascular en la circulación periférica y en distintos órganos, como: corazón, cerebro y riñón. Por supuesto, una mayor protección se logra con un mayor control o eliminación de otros factores de riesgo y el empleo de drogas cardiovasculares que hayan mostrado propiedades específicas para interferir importantes mecanismos moleculares y celulares participantes de la aterosclerosis y de la enfermedad cardiovascular hipertensiva. (46)

 

Por otra parte, no hay que dejar de lado el impacto económico que puede representar para el paciente, un tratamiento antihipertensivo prolongado donde el riesgo a futuro puede ser modificado, en mayor o menor grado, de acuerdo a las estrategias planteadas por el médico tratante. La buena cobertura terapéutica, con toda seguridad, se va a reflejar en un menor riesgo de eventos clínicos mayores. Tampoco hay que perder de vista que las modificaciones del estilo de vida desempeñan un papel fundamental para lograr el éxito deseado y contribuyen, de manera importante, a reducir la carga económica del tratamiento farmacológico. (47)

 

Estratificación del riesgo y tratamiento en los pacientes hipertensos.

 

HTA_hipertension_arterial/estratificacion_riesgo_tratamiento

 

Grupo A de riesgo: Ningún factor de riesgo presente, ni daño a órganos blancos (DOB), ni enfermedad cardiovascular clínica (ECVC).

Grupo B de riesgo: Al menos un factor de riesgo – excluyendo diabetes – y sin daño a órganos blancos ni enfermedad cardiovascular clínica.

Grupo C de riesgo: Presencia de daño a órganos blancos o enfermedad cardiovascular clínica, y/o diabetes, con o sin otro factor de riesgo.

 

#: Para pacientes con insuficiencia cardíaca, renal o diabéticos.

*: En caso de pacientes con varios factores de riesgo, el médico debe considerar inicio inmediato del tratamiento farmacológico asociado a los cambios en el estilo de vida.

 

“Es posible que en un futuro cercano se pueda disponer de un tratamiento más radical de la hipertensión arterial, pero los principios de la prevención –primaria o secundaria- seguirán inmutables y continuarán siendo la primera línea de ataque en la reducción de la morbimortalidad de causa vascular. No es sólo buscar algo que trabaje mejor, también es conocer y emplear lo que mejor funcione.”

 

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