Metastasis y curacion espontanea del cancer
Autor: Dr. P. García Férriz | Publicado:  28/06/2010 | Oncologia | |
Metastasis y curacion espontanea del cancer .6

El corazón consta de dos tipos de células musculares: contráctiles y de conducción. Las células contráctiles comprenden la mayor parte del tejido auricular y ventricular 10, y son las células de trabajo cardiaco. Los potenciales de acción de las células contráctiles provocan la contracción y generan fuerza o presión.

Las células de conducción incluyen los tejidos del nodo sinoauricular (SA), fascículos internodales de la aurícula (a los que ya hemos hecho amplia referencia en anteriores trabajos publicados), nodo aurículo-ventricular (AV), haz de His y sistema de Purkinje. Las de conducción son células musculares especializadas que no se contraen ni generan fuerza. 10 Su función esencial es propagar rápidamente los potenciales de acción débiles sobre todo el miocardio. 10 También, los tejidos especializados de conducción son su capacidad para generar potenciales de acción de manera espontánea. Sin embargo, esta capacidad está suprimida normalmente, salvo por el nodo sinoauricular (SA). 10

El potencial de acción se propaga a través de los fascículos internodales (Fig. 3), que también hemos mencionado en el trabajo que publicamos con el título “Cáncer. Etiopatogenia”. Sin embargo, debemos añadir unos datos sobre los ventrículos, por considerarlos de particular interés: la velocidad de conducción a través del nodo aurículo-ventricular (AV) es mucho más lenta que en otros tejidos cardiacos. La conducción lenta a través del nodo aurículo-ventricular (AV) garantiza que los ventrículos cuenten con el tiempo suficiente para llenarse de sangre antes de ser activados para contraerse. 10 También, desde el nodo AV, el potencial de acción penetra en el sistema específico de conducción de los ventrículos. La conducción del potencial de acción a través de los ventrículos es también indispensable y permite una contracción y expulsión eficientes de la sangre. 10 (Fig. 8)

Un ritmo sinusal normal significa patrón y secuencia normales de la activación eléctrica del corazón. 10 Para calificar como normal un ritmo sinusal se deben satisfacer los tres criterios siguientes:
a) potenciales de acción originados en el nodo sinoauricular (SA);
b) impulsos nodales SA con una frecuencia regular de 60-100 impulsos por minuto; y
c) la activación del miocardio debe ocurrir en la secuencia correcta y con los tiempos y retardos correctos. 10

Los conceptos aplicados a los potenciales de acción cardiacos son los mismos conceptos que rigen en los potenciales de acción en el nervio, músculo esquelético y músculo liso 10, pero con una intensidad electroquímica muy inferior a la de los distintos órganos, glándulas y tejidos de nuestro organismo, donde los potenciales de acción se efectúan con mayor intensidad, y están expuestos a producir y a recibir grandes intensidades electroquímicas. En cambio, la electricidad del corazón es extracardíaca, procedente del nervio vago y del simpático (Figuras 5 y 6). Estos dos importantes nervios forman tres plexos: plexo retroaórtico, preaórtico y subaórtico (Figura 7). De este último plexo parten unos finos nervios que presentan en su trayecto unos pequeños ganglios celulares que le proporcionan mayor energía conductora. Estos finos nervios se dirigen hacia la parte posterior de la aurícula derecha, que es el punto donde se origina el disparo eléctrico. Las acciones electroquímicas, pues, se realizan en el corazón de forma pausada y rítmica, bajo el mandato siempre (salvo patología) de potenciales eléctricos débiles, insuficientes para poder producir intensas actividades electroquímicas como ocurre en la mayor parte de nuestro cuerpo. Es evidente que las bases iónicas para los potenciales de acción en las aurículas, ventrículos y sistema de Purkinje son idénticas. 10 Todas las fases de despolarización que se producen en el endocardio se realizan a un nivel subumbral bastante más inferior que en el resto de nuestro organismo 10, pero con la fuerza o intensidad suficiente para mantener con constante energía sus propios impulsos electroquímicos.

De aquí, que en el corazón el cociente de Loeb se mantenga constantemente en equilibrio. El coeficiente de Loeb es el siguiente:

K+ + Na+
---------------- = 1 El 1 representa el equilibrio iónico
Ca2+ + Mg2+

La velocidad de conducción cardiaca tiene el mismo significado que en las fibras nerviosas y músculo esquelético. 10 Determina cuánto tiempo tomará el potencial de acción para propagarse a diferentes sitios en el miocardio. 10

Su excitabilidad es la capacidad de las células miocárdicas para generar potenciales de acción en respuesta a una corriente interna despolarizante. 10 La excitabilidad de una célula miocárdica varía durante el curso del potencial de acción y estos cambios de excitabilidad se reflejan en los periodos refractarios. Las bases fisiológicas para el periodo refractario en las células miocárdicas son similares a las de las células nerviosas. 10

En estas condiciones electroiónicas es muy difícil que pueda producirse un sarcoma primario en el corazón. No vemos otra causa.

Efectos autónomos sobre la velocidad de conducción en el nodo auriculoventricular (av)

Los efectos del sistema nervioso autónomo sobre la velocidad de conducción se denominan efectos dromotrópicos. 10 El aumento de la velocidad de conducción se conoce como efecto dromotrópico positivo y la disminución de la velocidad de conducción se llama efecto dromotrópico negativo. 10 Los efectos más importantes del sistema nervioso autónomo sobre la velocidad de conducción recaen sobre el nodo AV que, en efecto, altera la velocidad de conducción de los potenciales de acción desde la aurícula hasta los ventrículos. 10

La estimulación del sistema nervioso parasimpático genera un incremento de la velocidad de conducción a través del nodo aurículo-ventricular (AV) (efecto dromotrópico negativo), que aumenta la velocidad de conducción de los potenciales de acción sobre las aurículas hasta los ventrículos.

La estimulación del sistema nervioso simpático reduce la velocidad de conducción a través del nodo AV (efecto dromotrópico positivo), que disminuye la velocidad de conducción de los potenciales de acción desde la aurícula hasta los ventrículos.

Todas estas velocidades eléctricas que acabamos de describir, que van desde la parte posterior de la aurícula derecha hasta el nodo aurículo-ventricular (AV), parten con una conducción conteniendo esencialmente cargas eléctricas de signo positivo, por lo que puede afirmarse, y así lo confirman los hechos, que la actividad eléctrica intracardíaca es insuficiente para producir excitación celular intensa como las que suelen producirse frecuentemente en los sistemas nerviosos central y autónomo (neurovegetativo).

De la misma manera que ocurre en los músculos esquelético y liso, el acoplamiento excitación-contracción del músculo cardiaco traduce el potencial de acción en la generación de tensión 10, pero a unos niveles soportables dentro del marco de un normal funcionamiento electrofisiológico, incapaz de producir peligrosas intensidades eléctricas. Si estas intensidades se produjesen, se formarían los sarcomas primarios con la misma frecuencia que en los sistemas neurovegetativo y central. Afortunadamente esto no sucede así en el corazón.

Con esta breve y concisa descripción neuroanatómica, neurofisiológica y electroquímica del corazón, consideramos haber sentado una base más que suficiente para comprender el porqué es muy difícil la producción tumoral cardiaca.

Pero también es extremadamente raro que el cáncer se produzca en el diafragma. En trabajos anteriormente publicados exponemos ampliamente el porqué el neoplasma se produce aún con más escasez que en el músculo cardiaco, incluso a través de procesos metastáticos. La metástasis tumoral cardiaca, aun no siendo frecuente, la casuística mundial nos dice que la producción de un tumor primario o secundario del diafragma presenta una mayor ausencia. El estudio de la electrofisiología del músculo diafragmático nos aclara y demuestra que los potenciales eléctricos de sus células se producen por excitaciones aún menos intensas, siendo por tanto dichos potenciales más débiles que en las células cardiacas. Y al ser débiles sus potenciales eléctricos por tener en el interior de la membrana celular solamente cargas eléctricas positivas, creemos que es lo suficiente para convencer sobre la causa por la que no pueden producirse intensos potenciales de acción (excitación).

Tratamiento. Sugerencias

Antes de esbozar y dar a conocer las cualidades curativas del “par biomagnético” que nos da a conocer el Doctor Isaac Goiz, hemos creído oportuno exponer unos breves conceptos sobre los imanes

Imanes

El imán está rodeado de un campo magnético. Un imán, frecuentemente en forma de herradura o de barra que mantiene la magnetización indefinidamente (siempre que no se caliente, golpee o se exponga a extraños campos magnéticos), es llamado imán permanente o electroimán.

En la mayoría de las máquinas eléctricas es un electroimán. Los imanes son materiales que producen campos magnéticos debido a las corrientes microscópicas de los electrones y a los espines de sus partículas, tanto electrones como núcleos. En tal sentido, nos hace pensar en la posibilidad de que, aplicando unos polos electromagnéticos en nuestro organismo en la forma que ya hemos apuntado, podrían obtenerse resultados muy óptimos en el tratamiento de todos los procesos tumorales.


Revista Electronica de PortalesMedicos.com
INICIO - NOVEDADES - ÚLTIMO NÚMERO - ESPECIALIDADES - INFORMACIÓN AUTORES
© PortalesMedicos, S.L.
PortadaAcerca deAviso LegalPolítica de PrivacidadCookiesPublicidadContactar