Hola a todos. Me diacnosticaron esquizofrenia paranoide en 2010 pero yo no hice caso de eso. Sin embargo acepté la posibilidad de tener una enfermedad pues no tenía amigos y estaba centrado en el tema de siempre; y siempre en silencio, taciturno y lacónico. Al principio tengo que reconocer que no creía tener la enfermedad y me negaba a tomar la medicación, lo cual me supuso otro ingreso en un psiquiatrico. Entonces a fuerza de esos golpes que te da la vida tuve que aceptar tomar la medicación. Poco a poco con el tiempo iba aceptando más ayuda cada vez, pero no dejaba de creer en mi paranoia, lo cual me suponía una vida de resignación y tortura pues pensaba que incluso mi propia familia me engañaba y me preguntaba porqué. La resignación era tal que no hacía nada y engañaba a mi psiquiatra y a mis padres cada vez que me preguntaban por el tema diciéndoles que todo iba bien. Ayer vi un caso similar al mio en un foro y entendí que lo que tenía yo era una enfermedad y no otro problema. Fue como despertar de una pesadilla. Tengo 30 años. Estoy solo, no busco amistad. Me gustaría relacionarme mejor y envido de forma sana a la gente guay. Solo he tenido un amor en mi vida y ha sido platónico, ahora creo que me conozco lo bastante bien como para no tener pareja, aunque no estoy cerrado no lo busco y me pregunto si he sido yo el que ha desafiado a la enfermedad o ella ha llamado a mi puerta. Me describo porque yo al ver un caso similar al mío entré en razón y todo gracias a que yo acepté tomar medicación y hacía caso de mi psiquiatra, aunque no le creyera. Mi enfermedad me había tenido 5 años resignado a una realidad paralela y ha sido una tortura. Mi consejo es que siempre toméis la medicación y hagáis caso de vuestro psiquiatra aunque creaís que no tenéis nada pues la medicación no supone una cadena, sino alas y lo comprobaréis porque podréis estar como yo estoy ahora, estudiando una carrera y centrado en mis cosas, no en un tema absurdo. Espero que mi ejemplo sirva a alguien más.