Hace poco terminé mi tratamiento en Formación en Implantología y ha quedado genial. Me tuvieron que poner varios implantes para recuperar las muelas que se me habian dañado y las habia perdido. Esteticamente era una faena, porque cuando me reia de verdad se veia que me faltaban las muelas, pero lo peor era que no era capaz de comer en condiciones. Ahora ya tengo mis piezas completas y no tengo que avergonzarme cuando rio y a la hora de comer no me corto, ahora si que disfruto de la comida sin miedo a morder.