PSORIASIS
El 3% de los pacientes con HIV la padecen, contra un 2% de la población general, pudiendo resultar de la exacerbación de una psoriasis antigua o de comienzo; en este último caso reviste una gran importancia como marcador de infección por HIV.
Foto 22: Psoriasis

Fuente:www.bayroraids.org/atlas20.htm
Puede iniciarse en cualquiera de sus variantes clínicas, aunque generalmente se ve con más frecuencia la forma inversa o guttata, para agravarse luego adoptando la forma en placa o queratodérmica (similar al Síndrome de Reiter), evolucionando en los casos más severos hasta la eritrodermia, siendo con frecuencia refractaria a los tratamientos convencionales.
PROCESOS VASCULOPURPÚRICOS
TELANGIECTASIAS
Se ha demostrado estadísticamente que las telangiectasias son cuatro veces más frecuentes en sujetos HIV positivos, apareciendo característicamente en tórax, de hombro a hombro y por encima de las clavículas. A veces se extienden a los costados del cuello. En oportunidades se localizan en dedos de manos y en palmas.
VASCULITIS
Se observa ocasionalmente vasculitis purpúrica (púrpura palpable) que por lo general predomina en miembros inferiores.
La imagen microscópica corresponde a una vasculitis leucocitoclástica, en la que los estudios de inmunofluorescencia demuestran el depósito de complemento.
PÚRPURA TROMBOCITOPÉNICA IDIOPÁTICA (PTI)
A diferencia de la púrpura trombocitopénica idiopática (PTI) clásica que predomina en el sexo femenino (3 a 1), la que acompaña al SIDA se ha observado exclusivamente en varones jóvenes. La trombocitopenia es severa (promedio 16.000-3.000 plaquetas/mm3) y se acompaña, como en la forma clásica, de megacariocitos y proliferación megacariocítica medular.
Clínicamente se exterioriza por petequias y equimosis cutaneomucosas. Suelen observarse epistaxis, hemorragias gingivales y bucales y en la piel predominan los hematomas espontáneos o provocados.
FARMACODERMIAS
Los pacientes infectados con el virus de la inmunodeficiencia humana se encuentran particularmente predispuestos a desarrollar reacciones cutáneas adversas a fármacos, habiéndose pretendido explicar dicho fenómeno por diversas reacciones.
Foto 23: Rash por trimetroprim-sulfametoxazol (TMS)

Fuente:www.bayroraids.org/atlas/20.htm
La prevalencia de reacciones adversas a las sulfamidas en los HIV+ varía entre 70 y 83%, en contraste con el 2-4% de la población general. Resulta importante consignar que la frecuencia de farmacodermia por sulfamidas en imnunosupresiones no relacionadas con la infección por HIV, es similar a la de la población general, por lo tanto la elevada incidencia de estas reacciones parece ser específica de la infección por HIV.
La prevalencia de Síndrome de Lyell en pacientes HIV+ tratados con sulfamidas es alta: 15%. La extensión del cuadro es, en estos pacientes, mayor y la cicatrización más lenta, con elevada mortalidad.
La aparición de un brote cutáneo en pacientes con SIDA que recibe sulfamidas debe hacer sospechar farmacodermias, que puede ser grave sobre todo si existe compromiso inicial o precoz de mucosas y alteración importante del estado general. De inmediato deben adoptarse medidas de orden general y suprimir el fármaco.
Tabla 5. Farmacodermias en HIV
Drogas desencadenantes. Sulfamidas (TMS)
- Eritromicina
- Dicloxacilina
- Rifampicina
- Isoniacida
- Tetraciclina
- Penicilina
- Cotrimoxazol
- Difenilhidantoína
Manifestaciones clínicas. Rash eritematoso maculo-papular
- Síndrome de Steven Johnson
- Necrolisis epidérmica tóxica (Lyell)
- Erupciones eccematoideas
- Urticaria
- Vasculitis
- Púrpura
Fuente: elaborada por los autores
MANIFESTACIONES MISCELÁNEAS EN HIV
SÍNDROME SWEET
Aunque raro en pediatría, el Síndrome Sweet debería ser considerado en niños que presentan nódulos o placas múltiples, dolorosas y rojo-violáceas.
En 1986, Su y Lui, propusieron dos criterios mayores y cuatro menores para su diagnóstico. Requiriéndose para un diagnóstico definitivo ambos criterios mayores y al menos dos criterios menores.
Criterios mayores:
- Aparición abrupta de placas o nódulos eritematosos.
- Infiltración neutrofílica de la dermis sin vasculitis leucocitoclástica.
Criterios menores:
- Síntomas prodrómicos de fiebre o infección.
- Coexistencia de conjuntivitis, fiebre, artralgias.
- Leucocitosis.
- Buena respuesta a los esteroides sistémicos.