Existe un período vulnerable que comienza con la apertura del órgano y que perdura hasta cuatro horas después. Por ende es en este lapso de tiempo cuando existen mayores posibilidades de que se produzca una sepsis. Cuando decimos profilaxis perioperatoria nos referimos a que esta debe comenzar antes de la intervención quirúrgica con el objetivo de que existan niveles terapéuticos del antimicrobiano en el momento de máxima contaminación.
Este tipo de terapéutica se preconiza en la cirugía gastroesofágica, colon, vías biliares complicadas, sepsis local y como ya hemos dicho en las prótesis y trasplantes.
Aunque existen múltiples antibacterianos y de hecho varios de ellos han sido utilizados; se recomiendan las cefalosporinas de tercera y cuarta generación combinados o no con aminoglucósidos lo que conlleva a un sinergismo y siempre cuidando la posible toxicidad renal de la combinación.
En este segmento también queremos referirnos a la llamada quimioprofilaxis de resultados no demostrados la cual no aparece como indicación de antibióticos profilácticos; pero desgraciadamente y sin criterio científico los médicos la utilizamos.
Estas situaciones son:
- Glomerulonefritis postestreptocócica.
- Endocarditis infecciosa.
- Infecciones por clostridium.
- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
- Fibrosis quística.
- Otras.
Desaconsejamos su uso por no estar demostrado por la ciencia moderna que en realidad se resuelve algún problema con su uso. En realidad creamos un problema; sensibilización y uso empírico.
POLÍTICA DE ANTIBIÓTICOS.
La investigación en farmacología clínica ha revelado que el uso óptimo de fármacos potentes puede mejorar enormemente la expectativa y la calidad de vida de muchos enfermos. Sin embargo, nos guste o no, asegurar una utilización de medicamentos óptima y apropiada es una tarea difícil, tanto en relación con la adopción de criterios farmacológicos – clínicos justificados, como desde un punto de vista de política farmacéutica. Los antimicrobianos no deben ser considerados productos de consumo puesto que su utilización condiciona la transformación de la ecología local y por tanto representan una responsabilidad social; de ahí que la política antibiótica debe ir encaminada a una adecuación entre el uso y el consumo de los mismos así como las necesidades de la población.
El objetivo principal de la política antibiótica es reducir al mínimo el problema de la resistencia a los antibióticos; así como conseguir una utilización óptima de los mismos en función de la eficacia, seguridad y coste. Para conseguir este objetivo es necesario: a) usar siempre la terapéutica antibiótica de espectro más reducido; b) definir un grupo de antibióticos que se quiere reservar para tratar infecciones por microorganismos más resistentes o infecciones más graves y refractarias.
La política antibiótica por tanto debe partir de una adecuada selección de un determinado producto para el tratamiento de una determinada infección de una forma lógica y racional, tanto del paciente aislado como en el marco de la comunidad; selección esta que requiere estar al tanto de los nuevos conocimientos científico – técnicos en este campo, tanto, de los fármacos a tratar como de las infecciones y sensibilidad o resistencia de los antibióticos.
En primer lugar hay que tener en consideración la información sobre el uso; más del 90% del consumo total de estos productos se produce en el marco extrahospitalario lo cual podría condicionar una inversión de la flora a dicho nivel. En segundo lugar es necesario conocer la etiología de la sepsis y resistencia antibiótica. Tener una correcta información sobre indicación, prescripción y efectos secundarios conlleva a una adecuada selección así como a una correcta dispensación y total jerarquización. Detallada educación en la comunidad; con mucho es muy importante.
ANTIMICROBIANOS ESPECÍFICOS
En el siguiente cuadro examinaremos los fármacos de elección y algunas alternativas terapéuticas (Cuadro III) recomendadas de las enfermedades ocasionadas por bacterias específicas; aunque debemos señalar que el proceso de selección se encuentra simplificado.
Cuadro III: Fármacos de elección y algunas alternativas terapéuticas.
Agente causal - Fármacos de elección (*) - Fármaco alternativo (&)
Cocos grampositivos
Estafilococo coagulasa negativa - S. Aureus
No productor de penicilinasa - Penicilina G o V – Cefalosporinas (£), Vancomicina, Clindamicina, Eritromicina.
Productor de penicilinasa - Nafcilina, Oxacilina - Cefalosporinas (£), Vancomicina, Clindamicina, Eritromicina, Imipenem, Combinaciones de betalactámicos/inhibidor de betalactamasas.
Resistente a Meticilina (€) – Vancomicina - TMP-SMX, Minociclina, Teicoplanina.
Estreptococo β – hemolítico (grupos A, B, C, G) - Penicilina G o V – Cefalosporinas (£), Eritromicina, Vancomicina, Clindamicina.
Estreptococo Viridans - Penicilina G – Cefalosporinas (£), Vancomicina, Eritromicina
Enterococo
Infección urinaria no complicada - Ampicilina, Amoxicilina - Nitrofurantoína, Quinolona
Infección moderada de la herida – Ampicilina - Penicilina G, Vancomicina
Infección Grave: Endocarditis - Ampicilina y Gentamicina o Estreptomicina - Vancomicina +Gentamicina o Estreptomicina
Streptococcus Pneumoniae (€)
Neumonía, Infecciones de vías respiratorias superiores - Penicilina G, Amoxicilina, Ceftriaxona – Clindamicina, Eritromicina, Vancomicina.
Meningitis – Cefotaxima – Ceftriaxona + vancomicina +- Rifampicina
Cocos gramnegativos
Neisseria Gonorrhoeae - Ceftriaxona, Cefixima - Cefalosporinas de 2a y 3a generación**, Quinolonasד, TMP – SMX, Azitromicina
Neisseria Meningitidis - Penicilina G - Cefalosporinas de 3a generación**, Cloranfenicol, Sulfonamidas
Bacilos grampositivos
Bacilo Anthracis (Carbunco) - Penicilina G - Eritromicina, Tetraciclina
Corynebacterium Diphtheriae – Eritromicina - Penicilina G
Clostridium Perfringens - Penicilina G - Metronidazol, Cloramfenicol, Imipenem, Tetraciclina.
Clostridium Difficile – Metronidazol - Vancomicina (sólo bucal), Bacitracina
Bacilos gramnegativos (€)
Especies Acinetobacter - Imipenem± Gentamicina – Ureidopenicilinas, Aminoglucósidos
Bordetella Pertussis (Tos ferina) – Eritromicina - TMP – SMX, Ampicilina
Brucelosis - Tetraciclina± Gentamicina o Estreptomicina - Tetraciclina + Rifampicina, Cloramfenicol ± Estreptomicina, TMP–SMX
Especies de Enterobacter - Imipenem, Aminoglucósidos (ψ) – Quinolonas, Cefalosporinas de 3a generación**, Cefepima, TMP – SMX
E. Coli
Infección urinaria no complicada - TMP – SMX - Ampicilina, Cefalosporinas (£), Trimetoprim, Quinolonas, Tetraciclinas.