Te platico:

Para ingresar al colegio a mis 19 años, nos sometieron al examen médico obligatorio. En el salón ingresabamos en grupos de 10 en 10. Lo primero era desnudarnos totalmente, después, la enfermera llenaba la ficha de historial, peso, altura, presión arterial.

Al revisar los genitales, el médico obligaba a pelarla lo más que se pudiera; en el grupo hubieron dos o tres circuncidados, que pasaron la prueba, pero también otros tres que no pudieron pelarsela, los apartaron para circuncidarlos. Con facilidad me la pelé, pero al bajarme hasta atrás el prepucio, se me tenso el frenillo y la cabeza se torció. Esto pasó con otros dos de los compañeros. De inmediato, pasamos al quirofano los tres o cuatro postulantes. En menos de una hora, con bistuirí electrico, nos eliminaron el frenillo corto que teniamos.

Desde entonces, aconsejo a todos los padres, que revisen el pene de sus hijos, que se pele totalmente desde la más tierna infancia y que se elimine el frenillo; es más fácil que una curación de dentista.