Hola María José; antes que nada quiero felicirtarte las fiestas y desearte un Feliz 2011 a tí a todos los del foro.

Como habíamos comentado semanas atrás, yo tenía pendiente el ir a mi revisión de cardio por primera vez en el hospital de Vall Hebrón. Pese a que ya me comentaste tu experiencia no muy grata por cierto, he de decir que en cuanto a la mía se cumplieron todos mis malos presagios. Fue un desastre. No tanto por la visita con la cardióloga que tan poco fue muy acertada ese día en concreto, la verdad, sino más bien por la gran desorganización que nos encontramos, la falta de información a los que vamos por primera vez allí, la masificación por vernos mezclados a niños y adultos. En fin, una que intenta ser prudente, espero que con el tiempo las cosas se vayan solucinando, pero de entrada te quedas con una sensación de desamparo, de no saber muy bien donde y como van a ir las cosas que te produce una inseguridad increíble.

Y esto no solo lo percibí y lo viví yo que soy la afectada. Mi marido que me acompañó salió de allí hecho polvo y muy molesto por todo lo sucedido. De modo que los familiares también viven esta situación y ahora se dan cuenta de lo indefensos que nos podemos llegar a ver cuando las cosas no están controladas, no están debidamente informado, y no saben ni conocen nada de tí. Creo que a estas alturas y después de los meses que se supone que lleva en marcha esta nueva unidad, las cosas podrían ir un poco mejor.

En este sentido quiero decir a la persona que apunta en su mensaje que lleva varios años visitándose en Vall Hebrón como adulto y que nunca a tenido ningún problema, que no lo pongo en duda. No se si ya llevas años visitándote allí y por lo tanto ya llevas desde la infancia y adolescencia. En ese caso está claro que visitan a cardiópatas adultos. Sois los cardiópatas que desde pediatría habéis llegado a la edad adulta y por lo tanto habéis tenido la continuidad. Cosa muy diferente a empezar de cero y más cuando lo que esperas es una unidad multidisciplinar donde solamente los jóvenes y adultos tienen su propio espacio. Esto no es lo que yo me he encontrado, y muchas personas que me han escrito son de la misma opinión. Dicen que las comparaciones son odiosas, pero en este caso yo estaba "muy bien acostumbrada" a la organización de Sant Pau, a todos los departamentos que me visitan y controlan conocen mi caso y saben como actuar, la nueva infraestructura que han desarrollado con el nuevo hospital y nueva organización y planificación que funciona muy bien. No me tenía que preocupar de nada. Solo de acudir a la visita y punto. Aquí tuve que hacer una gimcana para informarme primero y ser atendida después.

En fin, espero que para la próxima visita, pueda decir cosas más positivas que no el descontento que llevo encima de mi paso por esta mi primera vez en Vall Hebrón.

Por cierto María José, me encantaría conocerte si vienes a Barcelona nuevamente. Si me dejas una dirección de correo electrónico nos mantenemos informadas.....
Un abrazo y hasta otro rato.

Conchi.