No se puede medir bien la tensión arterial, colocando un manguito pequeño e inflándolo hasta estar a punto de estallar.

Ahora me pongo a razonar como funciona un tensiómetro de los que usan los médicos, que por cierto es un aparato del pleistoceno, bueno podríamos decir que básicamente es un barómetro, y como tal es sensible a los cambios en la presión atmosférica, pero es que además estos aparatos necesitan de constantes revisiones para calibrarlos.

Y digo yo que estos tensiómetros pueden funcionar en el brazo de uno que ha tenido la polio, que no tiene ná, nada más que hueso, o en uno que tiene sus músculos como chicle, pero dudo que funcione en una persona que tiene los músculos del brazo muy duros.

Bien, según la situación actual se considera hipertensión por encima de 140-90, no todos los seres humanos tenemos la misma temperatura, ni la misma glucemia, en resumidas cuentas no somos todos iguales, con la tensión arterial pasa lo mismo y por este motivo hay un margen, hay una línea divisoria entre una tensión normal alta y la hipertensión arterial.

Pues bien, cuando alguien está alterado por motivos sicológicos, por razones fisiológicas su tensión sube y su glucemia también, esto es porque el organismo se pone en alerta gracias a la adrenalina, y la tensión sube y la glucemia también para tener más oxígeno y más energía por si tenemos que huir o luchar.

Por esto, es importante que los médicos comprendan el estado de ánimo de sus pacientes.

Lo de las farmacéuticas es algo oculto a la opinión pública pero totalmente cierto, una vecina mía trabajó durante años como comercial para barias farmacéuticas, y ella suministraba “regalos” a los médicos para que recetaran los medicamentos de las empresas que representaba.

Digamos que cuanto más recetas más “regalos” tienen los médicos.

Esto pervierte la medicina, además la mayoría de los médicos necesitan de cursos de formación para la correcta aplicación de nuevos fármacos y tratamientos, y estos cursos son sufragados por las mismas farmacéuticas.

Podríamos decir que las farmacéuticas forman a sus médicos, para que receten sus medicamentos.

Con respecto al señor Schwarzenegger, bueno no sé si cuando era joven se cuidó, pero los purazos que se fumaba cuando consiguió la fama en Hollywood no debían ser muy sanos que digamos.

No sé si usted es médico, pero es muy común entre algunos facultativos que no han dado un palo al agua, y quiero decir con esto del palo al agua a que no han hecho ejercicio en su vida, el decir que todo ejercicio es malo y en especial el ejercicio de musculación, creo que esto está relacionado con lo que pasaba en la escuela cuando un matón abusaba de los empollones, o algo parecido, perdón por alargarme tanto, pero aprovecho para decir que no por estar musculado uno se convierte en un gorila descerebrado. También podríamos decir, que el aumento de los atributos masculinos mediante el aumento de la masa muscular, crea cierto rechazo en el resto de los hombres, ¡bueno! menos en los homosexuales.

No pasa nada usted siga metiendo miedo para así poder vender más pastillas, un día se las van a recetar a todos los recién nacidos, y no queda mucho tiempo para esto.