Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.3
El establecimiento del signo – señal no es más que la formación de un sistema de conexiones nerviosas temporales en la corteza que entran en funcionamiento por medio de la palabra.
La formación del reflejo condicionado signo-señal es importante porque ahorra tener que comenzar desde el principio cada sesión, por lo tanto, es necesario que el mismo quede muy bien establecido, de modo tal que en cualquier parte del tratamiento donde nos encontremos pueda ser aplicado y aparezca la respuesta.
Se debe ejecutar el restablecimiento del signo-señal lenta y meticulosamente, repitiendo lo más posible las sugestiones, sin vacilaciones, memorizando el esquema y el texto que se va a utilizar, pero siempre debe estar dentro del siguiente parámetro: De ahora en adelante...será innecesario repetir todos los ejercicios... para que se relaje...totalmente... mucho más profundamente que ahora... Cuando yo le diga a usted... relájese y duerma... usted cerrará sus ojos... aflojará su cuerpo... y estará en un estado... de sueño profundo... mucho más profundo que ahora... sus párpados se sentirán... pesados... y sentirá el deseo de quedar... profundamente dormido...
Es necesario repetir esto varias veces para que el sujeto lo grabe y se establezca el reflejo condicionado. Si ya se tiene dominio de la forma de despertar al sujeto, se proceder a realizar dicho acto de la siguiente manera: Ahora yo lo despertaré…y usted no tendrá dolor de cabeza... ni de cuello... estará tranquilo... como si hubiera dormido...durante mucho tiempo... pero cuando yo le diga... relájese y duerma... usted cerrará sus ojos... aflojará su cuerpo... y entrará en un estado... de sueño profundo... mucho más profundo que ahora...
Después de aplicada la técnica y que el sujeto haya despertado, se le pregunta cómo se siente, si tiene dolores, si está tranquilo. Posteriormente se le sitúa en la misma posición en que fue hipnotizado, se le relaja y se le dice la consigna del signo-señal relájese y duerma...relájese y duerma….
En la formación del signo-señal deben tenerse en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Repita varias veces la consigna y el proceso que la misma producirá.
- No despierte nunca al sujeto sin haberlo preparado. es decir, sugiérale que al abrir los ojos se sentirá bien, sin dolores de cabeza o corporales.
- No debe sugerirle que despertará sin sueño.
- No debe esperar que trascurra mucho tiempo entre el despertar y el uso de la consigna del signo-señal. Solamente se pregunta cómo está, si se siente bien y se cierra la conversación.
Ahora ponga atención, voy a contar... hasta tres... y usted va a despertar... completamente despejado... sin dolor de cabeza... como si hubiera dormido mucho... tranquila y profundamente... Recuerde...cuando cuente hasta tres... y dé dos palmadas... se despertará...Uno... sintiéndose bien... dos... se siente tranquilo... nada le preocupa... ya usted espera mi orden... para despertar... tres…Se dan dos palmadas y se le dice enérgica e imperativamente: ¡Despierte!
Por lo general, él paciente se despierta sin dificultades, pero si esto no ocurre, el hipnotizador no debe atormentarse ni preocuparse demasiado.
Esto sucede cuando:
- El sujeto está en un grado de inhibición muy profundo.
- Existen fallos en la utilización de la técnica.
- Se ha perdido el correspondiente rapport con el paciente.
Existe una maniobra que salva esta situación. Si automáticamente que se le da la orden no despierta, se le dan dos palmadas enérgicas en la frente y se le dice imperativamente: ¡Arriba!, ¡abra los ojos!... ¡ya puede abrirlos!...
Si no hacemos esto y dejamos al sujeto sin despertar, no le pasará nada, no sufrirá ningún daño, sino que pasará al poco rato a un sueño fisiológico. Podemos asegurar que es extremadamente difícil que el paciente no abra los ojos cuando se le dan las dos palmadas en la frente.
Si por casualidad se da el caso y el paciente no despierta, se le hacen las siguientes indicaciones:..Está bien... no importa... duerma...tranquilamente... que esto le hará mucho bien....
Esto se hace por si el paciente aún tiene algún grado de rapport con el hipnotizador, aunque el no despertar indica que el mismo se ha perdido.
Recomendamos a los profesionales que comienzan su entrenamiento con las técnicas hipnóticas, que al principio no trabajen sin tener la posibilidad de auxiliarse de un especialista en la materia, pues generalmente cuando se comienza se tiene cierta inseguridad y esto a veces provoca modificaciones en la conducta y actitud de los sujetos. No obstante, sugerimos la utilización de esta técnica que presenta una elevada eficiencia.
Cuando nos encontramos de nuevo ante el paciente, es necesario restablecer una buena relación médico paciente (el rapport), preguntarle cómo se ha sentido, decirle que la vez anterior cooperó muy bien, que en esta sesión se va a sentir mucho mejor, que ya conoce el método, que no le tiene temor, a través de una relación afectiva en la cual se logre que el paciente le tenga confianza al hipnólogo. Esto reduce considerablemente el nivel de ansiedad que por lo regular el paciente trae.
Una vez que se observa que ha disminuido la tensión y que está más calmado, se le sitúa en la posición adoptada en la sesión anterior y se le invita a que se relaje.
Esta es la preparación para aplicar el signo –señal, por lo se comienza diciendo:
Ahora usted…se afloje su cuerpo... aflójelo más...deje su cuerpo en reposo...
El hipnotizador debe comprobar mediante la maniobra del brazo (levantar el brazo y que caiga desplomado y en movimiento de péndulo cuando se suelta) si existe verdaderamente una relajación de la musculatura estriada; nunca debe dar la consigna del signo-señal hasta tanto no exista una relajación total.
Está muy bien... usted se ha relajado completamente... Ahora ponga atención sólo a mi voz... recuerde la sesión anterior... su cuerpo está relajado... relájese y duerma... deje sus ojos cerrados...suavemente... se está durmiendo profundamente... sus párpados están completamente pegados... cansados... abandonados... agotados...pesados... imposible separar... imposible separar... imposible separar...
Si el signo-señal quedó bien establecido, bastarán estas breves sugestiones y el sujeto quedará más relajado y en un estado de sueño hipnótico más profundo que la vez anterior. De todas formas, es necesario indicarle que mire hacia la frente y aplicar la maniobra de los pulgares (pasarle los dedos pulgares por los ojos, desde los lagrimales hasta la parte exterior) para lograr la convergencia de los globos oculares.
Se continúa buscando más concentración del sujeto con vistas a formar rápidamente la inhibición de las zonas motoras y premotoras de la corteza.
Piense en una sábana en blanco…repita mentalmente todo lo que yo le diga... duerma... tranquila y profundamente... sus párpados están pegados... muy pegados... cansados... muy cansados... imposible separarlos... imposible separarlos... usted cada vez... va sintiendo más sueño... más sueño... sus párpados... están pegados... cansados... abandonados... su cuerpo completamente relajado... abandonado, usted repita mentalmente... todo lo que yo le diga, ponga atención sólo a mi voz... sus párpados pegados... imposible separarlos... imposible separarlo... imposible separarlo... aunque usted intente no puede... imposible... están pegados... imposible separarlo... intente y verá que no puede... imposible... imposible separarlo...
Por lo general, no hay dificultad en lograr que el sujeto entre en estado hipnótico. No obstante, si esto no se logra, no debe aparecer preocupación en el hipnotizador y si hay preocupación, tratará de que no sea percibida por el sujeto. Se debe salvar el prestigio del procedimiento diciendo: No importa... está muy bien... eso era lo que yo esperaba.