La Universidad de Padua, forjadora del pensamiento medico y cientifico moderno. Capitulo 5. Siglo XVI
Autor: Dr. Julio C. Potenziani Bigelli | Publicado:  21/05/2010 | La Universidad de Padua, forjadora del pensamiento , Historia de la Medicina y la Enfermeria | |
La Universidad de Padua, forjadora pensamiento medico cientifico moderno. Capitulo 5. Siglo XVI .4

ORAZIO AUGENIO o HORATII AUGENII o HORATIUS AUGENIUS o HORATIUS AUGENIUS o ORAZIO AUGENJ o ORAZIO AUGENI (1527–1603)

Médico considerado uno de los grandes clínicos italianos del renacimiento. Se formó en Camerino, Pisa, Padua, donde fue discípulo de Francesco Frigimelica y Giovanni Battista da Monte, terminando su formación en Roma.

Profesor de Lógica en Macerata, obtuvo en 1559 la Cátedra de Medicina teórica en la Universidad de Roma. En 1578 pasa a la Universidad de Torino donde regentaba la cátedra de Medicina Practica. Y en 1592 obtuvo la cátedra ‘ad theoricam ordinariam medicinae’ de la Universidad de Padua hasta su muerte en 1603. Fue un exponente de la Medicina Humoral.

Sus contribuciones más importantes fueron en el campo de las fiebres, las sangrías, los cálculos vesicales, la peste, la neuropatología y la gestación.

Sus obras principales fueron: ‘Del modo di preservarsi dalla peste’ 1577, ‘De ratione curandi per sanguinis missionem’ 1570, ’De febribus, febrium signis, symptomatibus, & prognostico libri septem’ 1572, ‘Epistolarum et consultationum libri XXIV 1592, ‘Quod homini certum non sit nascendi tempus’ 1595. 

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PAOLO SARPI, o FRA SARPI, o FRA PAOLO (1552-1623)

Teólogo italiano agustiniano, astrónomo, matemático, físico, anatomista, literato y polemista, versado sobre múltiples campos del saber, fue definido por Girolamo Fabrici d'Acquapendente ‘Oracolo del secolo’, es decir oráculo del siglo.

A la edad de 20 años se volvió Teólogo del la Corte del Duque de Mantua, donde puso tener acceso a los estudios de los griegos, hebreos, estudios matemáticos, anatómicos y botánicos.

Fue uno de los grandes historiadores de los tiempos modernos en sus inicios y fue considerado el fundador del moderno método histórico.

Estudió Filosofía en la Universidad de Padua, centro intelectual más importante de Italia en ésa época. Se volvió famoso tanto por su defensa de la Republica Veneciana contra el Papado durante el Interdicto Veneciano de 1606 como por ser el controversial autor de la ‘Historia del Concilio de Trento’. Tenía un amplio margen de intereses intelectuales, plasmados en sus ´Pensieri´ colección de aforismos sobre tópicos filosóficos y científicos.

En el tema de la religión sus escritos son pragmáticos y con basamento filosófico. Fue un adelantado de las ideas científicas y filosóficas de su tiempo. Fue un líder del círculo de Galileo Galilei.

Indiferente a la religión formal en sus credos y prohibiciones del saber científico, humanístico e intelectual en general, excepto como instrumento de organización política y social, fue considerado por muchos como libertino y ateo.

Venecia reclamaba el control de la navegación por el Adriático y esto acrecentó el conflicto entre Roma y Venecia, al punto de que ésta prohibió la construcción de cualquier iglesia sin permiso del estado veneciano. Igualmente Roma prohibió las transferencias de propiedades reales a instituciones eclesiásticas sin el consentimiento del estado veneciano.

En la primavera de 1606 el Papa Paolo V (Camillo Borghese 1605-1621) excomulgó al Doge (Dux, Duce) Veneciano y colocó en Interdicto a todos los clérigos del dominio veneciano de realizar sus funciones. Venecia hizo caso omiso a esto y ordenó a sus clérigos que siguieran en sus funciones.

En éste momento intervino Sarpi escribiendo muchos memorandum en defensa de la jurisdicción veneciana. Luego de muchas negociaciones el interdicto fue retirado en 1607. Sarpi fue excomulgado en 1607 y mandado inclusive a asesinar por Roma en octubre de ése mismo año, sin éxito.

Mantuvo su puesto y su influencia en las políticas gubernamentales venecianas por el resto de su vida y se convirtió en un prolífico escritor del tema de las relaciones iglesia-estado. Su epistolario con personajes influyentes de toda Europa, tanto católicos, como protestantes fue una manera de adquirir apoyo para Venecia y reforzar su oposición a Roma y a los Habsburgos que apoyaban a ésta última.

Obtuvo información confidencial del Concilio de Trento (1545-1563) que puso en entredicho los manejos de la Iglesia en relación a soberanos como Carlos V de Alemania y España, manipulándolos para rechazar reformas internas de la Iglesia y mantener su poder. Discusiones interesantes sobre las posibles reformas eclesiásticas fueron borradas, pero Sarpi las tenía en sus manos y las hizo públicas.

Su ‘Istoria del Concilio Tridentino’ publicada en idioma italiano en Londres en 1619 bajo un pseudónimo, fue tildada de ponzoñosa y escandalosa y colocada en el ‘Index Librorum prohibitorum’. Sus escritos hicieron que la percepción del Papado en Europa cambiara y sus consecuencias fueron inmensas. Escribió la ‘Historia de los Beneficios’ (1609).

Luego de su muerte se convirtió en un héroe cívico reverenciado no solo en Italia sino en toda Europa. Sarpi era empírico y decía: "Hay cuatro maneras de filosofar: la primera con la razón sola, la segunda con el sentido solo, la tercera con la razón y luego el sentido, y la cuarta empezando con sentido y acabando con la razón. El primero es el peor, porque de él nosotros conocemos lo que nos gustaría ser, no lo que es. El tercero es una pena porque nosotros muchas veces torcemos lo que es en lo que nos gustaría que fuese, en lugar de ajustar lo que nos gustaría que fuese a lo que es. El segundo es verdad pero crudo, permitiéndonos saber poco y más bien de las cosas que de sus causas. El cuarto es el mejor que nosotros podemos tener en esta vida miserable".

Fue muy considerado también dentro del mundo científico. Había anticipado las ideas de John Locke, en sus ‘Tratados de Matemáticas y Metafísica’, lamentablemente perdidos.

En el campo de la medicina, específicamente de la Fisiología, se refiere que se había adelantado a los escritos del gran William Harvey acerca de la circulación sanguínea.

El único descubrimiento fisiológico que se le atribuye sin discusión es el de la contractilidad del iris. 

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