Vaginosis bacteriana, nivel inmunologico y un tratamiento alternativo
Autor: MSc. Dr. Jorge L. Irizar Hernández | Publicado:  27/07/2011 | Ginecologia y Obstetricia , Articulos | |
Vaginosis bacteriana, nivel inmunologico y un tratamiento alternativo .2

Las secreciones vaginales normales se caracterizan por ser:(2)

• Inodoras.
• Claras o blancas.
• Viscosas.
• Homogéneas o algo floculentas con elementos aglutinados.
• PH ácido < 4,5.
• No fluyen durante el examen del spéculum.
• Sin neutrófilos polimorfonucleares (PMNs).

La vaginosis bacteriana (VB) es una de las infecciones más frecuentes durante el período fértil de la mujer, se caracteriza por una secreción gris y fétida. Los riesgos de la infección son mayores en mujeres sometidas a operaciones ginecológicas o en embarazadas en las cuales puede tener lugar la infección del líquido amniótico y provocar parto prematuro o bajo peso al nacer.

La Vaginosis Bacteriana constituye una alteración de la flora vaginal, donde los Lactobacillus spp predominantes son reemplazados por varios microorganismos incluida Gardnerella vaginales y bacterias anaerobias, producto de alteraciones hormonales y los cambios sucesivos de parejas (4, 5).

A pesar de la etiología múltiple de la Vaginosis Bacteriana, la Gardnerella Vaginal se ha considerado el principal agente, porque presenta los factores de patogenicidad siguientes: una hemolisina que actúa sobre las células del amnios. En la superficie celular presenta una glicoproteína que posee una elevada afinidad por la lactoferrina humana presente en la mucosa vaginal. Existen diferentes biotipos de G. vaginales, los cuales en algunos casos están asociados o no a vaginosis bacteriana. (4)

Los estudios de proteínas fundamentalmente de membrana han contribuido a una mejor comprensión de la patogenicidad de muchas bacterias. De Gardnerella vaginales, poco se conoce sobre la identidad de sus proteínas de superficie y su relación con los diferentes perfiles bioquímicos observados. Las proteínas de superficie son blancas para los anticuerpos y no han sido caracterizadas en aislamientos de esta bacteria. (4)

En la mayoría de los países existe un subregistro importante de infecciones de transmisión sexual (ITS) y el número de los casos es mucho más alto del que se reporta. En nuestros policlínicos y por ende en los municipios no existe un registro individual para esta entidad, reportándose como patología ginecológica unida a otras por lo que no podemos hablar de% especifico de ella.

En condiciones normales, existe un perfecto equilibrio en la interacción del hombre con los gérmenes presentes en la piel, las mucosas y el aire. De ahí que muchos factores inmunológicos del huésped influyen sobre la probabilidad de adquirir una enfermedad infecciosa, ya que se rompe dicho equilibrio al aparecer un agente frente al cual el huésped carece de inmunidad específica, o por un defecto de los mecanismos de defensa de este ante las infecciones.

En revisiones realizadas se ha encontrado la asociación de la aparición de flujo vaginal a estados patológicos y a la ingestión de medicamentos, lo cual puede estar asociado al comprometimiento del sistema inmune propiciando la aparición de estas patologías. La función principal del sistema inmunológico (S I) es proteger al organismo de la agresión de agentes extraños de cualquier índole, como virus, bacterias o moléculas no reconocidas como propias, es decir, que no integren su estructura biológica. El sistema inmunológico es extraordinariamente complejo y está integrado por diferentes órganos, tejidos, células y moléculas que tienen relaciones interdependientes muy estrechas para poder responder adecuadamente a los agentes extraños.

De manera comprensible y esquemática, se puede clasificar la inmunidad en natural, con la que nacemos, y específica, que se adquiere durante el crecimiento y adaptación al medio. Sus componentes más importantes son: la piel y mucosas, los órganos linfoides como las amígdalas, las adenoides, el bazo, el timo, los ganglios linfáticos existentes en el tejido pulmonar e intestinal; proteínas que están presentes en la sangre, como las inmunoglobulinas, que son los anticuerpos, y numerosas células leucocitarias, dentro de las cuales tienen una participación muy especial los linfocitos, además de numerosas sustancias producidas por estos órganos y células. (6)

La inmunodeficiencia se produce cuando existe un defecto congénito de algún componente del sistema o cuando este se encuentra afectado por causas externas cuantitativas o cualitativas. (6)

La respuesta inmune normal requiere de un equilibrio o balance biológico muy sensible, que puede alterarse por muchas causas internas, o no dependientes del organismo, sino del medio y de la sociedad. Es lo más frecuente que estas alteraciones estén relacionadas con el padecimiento reiterado de enfermedades mayoritariamente infecciosas. (6, 7)

Para adoptar la conducta más adecuada con el enfermo, es indispensable la definición precisa del diagnóstico de la enfermedad de base o de las acciones terapéuticas que, como efecto secundario, hayan podido ocasionar una acción inmunodepresora en el paciente. (7, 8)

Actualmente se describen casi 100 enfermedades, y con el conocimiento más profundo del genoma humano, seguramente que esta cifra aumentará. La frecuencia de las Inmunodeficiencias primarias fluctúa entre 1 x 700 habitantes (la más frecuente) y 1 x 100.000 habitantes. (7)

En este tipo de inmunodeficiencia, lo que predomina son las infecciones a repetición que pueden afectar cualquier órgano del individuo. La afectación de estas infecciones recurrentes logra conocerse con un interrogatorio adecuado al paciente o familiar y un examen físico minucioso, que generalmente nos permite el diagnóstico presuntivo. (6, 7)

Las Inmunodeficiencias secundarias son mucho más frecuentes y pueden estar causadas por múltiples factores. Entre los más comunes pueden mencionarse las infecciones como el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), las enfermedades malignas, los defectos nutricionales, la extirpación de órganos linfoides como amígdalas y bazo, intoxicaciones por drogas o alcohol, la radioterapia, tratamientos con drogas inmunosupresoras como los citostáticos y corticoesteroides, quemaduras extensas y el estrés.(8)

El sistema de mucosas ejerce una protección frente a los antígenos que penetran directamente al organismo a través de los epitelios mucosos y en él se produce el primer encuentro (iniciación) entre el antígeno que penetra por las superficies mucosas y las células inmunes. En estos casos el principal mecanismo efector es la secreción directa de Ig A (Ig As) sobre la superficie del epitelio mucoso en cuestión. Las respuestas inmunitarias humorales a nivel de las mucosas son principalmente del isotipo Ig A. Las Ig A de secreción son unos anticuerpos capaces de atravesar las membranas mucosas, impidiendo de esa forma la penetración de microorganismos infecciosos. (9)

Su deficiencia conlleva a infecciones que en lo fundamental ocurren en los aparatos respiratorio, gastrointestinal y urogenital. La cuantificación de Ig A secretora es particularmente eficaz en función del costo. (10)

Es bueno recordar que las pruebas de la función inmunitaria proporcionan mucha mayor información y son más eficaces en función del costo que las que miden las concentraciones de inmunoglobulina y enumeran sub-poblaciones de linfocitos. (10)

Los exámenes de laboratorio que nos permiten el diagnóstico de las inmunodeficiencias incluye, entre otros, el hemograma, la cuantificación de las inmunoglobulinas (Igs) y de los anticuerpos, el estudio de los linfocitos y sus sub-poblaciones, la respuesta cutánea retardada y otras pruebas funcionales. (8, 11)

Es fundamental la preservación del sistema inmune con hábitos de vida sanos e higiénicos, nutrición adecuada en cantidad y calidad.

Echinacea:

Esta hierba prodigiosa es muy usada en EE.UU. y en Europa para elevar el sistema inmunológico y prevenir resfríos, gripe y otras infecciones virales y bacterianas. Al levantar las defensas del organismo colaboran en los tratamientos de los procesos inflamatorios, infecciosos o cancerosos. (12, 13, 14, 15)

Su acción:

• Estimula el sistema inmune
• Actúa como un antibiótico y antimicótico (contra hongos)
• Coadyuvante en los tratamientos contra el cáncer, al igual que la “Uña de gato” (Cat´s claw)
• Tiene una acción similar a la cortisona inhibiendo los procesos inflamatorios
• Se usa para acelerar la cura de heridas, reduciendo la inflamación
• Combate los resfríos, gripe, influenza (“flu”) e infecciones virales (herpes)
• En uso externo para limpieza, para las heridas, eczemas, psoriasis, vaginitis (inflamaciones de la vagina), herpes, abscesos
• Actúa en todos esos casos que por la baja de defensas debidas al estrés (físico, psíquico o tóxico), el organismo está expuesto a distintas patologías


Revista Electronica de PortalesMedicos.com
INICIO - NOVEDADES - ÚLTIMO NÚMERO - ESPECIALIDADES - INFORMACIÓN AUTORES
© PortalesMedicos, S.L.
PortadaAcerca deAviso LegalPolítica de PrivacidadCookiesPublicidadContactar