Es parte de una cultura masculina. Siempre desde niños tenemos una especial fijación por medirnos el pene con otros niños, como también causa impresión ser diferente del grupo pues se asume que es de mayor estatus tener un pene circunciso. Claro que me sentí menos con mis amigos y familiares que por la generación la mayoría habían sido circuncidados desde su nacimiento. Ahora tengo 19 años y me siento mucho más seguro, integrado a un grupo social que nos identificamos por llevar la circuncisión. Saludos!!!