Soy Eduardo, tengo 26 años, hace tres meses que me practicaron la circuncisión total. Afirmo que sí, porque no había caído en cuenta que desde niño cuando te bañas o cambias en un vestidor, te sientes mal por ser diferente cuando el resto de compañeros tienen su pene circuncidado. Ahora soy circunciso, y he logrado superar un problema que me generó complejo. Me siento bien. Coincido, valió la pena.