La Universidad de Padua forjadora pensamiento medico y cientifico moderno. Capitulo 2. Siglo XII .13
VII. La Universidad de Padua funda al OBSERVATORIO ASTRONÓMICO (1761-1777) en ‘La Specola’ monumento importante de la ciudad de Padua. Edificada en 1242, fue entonces la cárcel y el lugar de tortura de la tiranía de Ezzelino da Romano. En 1347 se reconstruye el castillo y Francesco de Carrara lo convierte en un baluarte defensivo pero finamente decorado. En 1767 la Republica Veneta establece que la torre mayor del castillo (Castel Vecchio) se convirtiera en Observatorio Astronómico (Specula astronómica). Fue una de los mejores observatorios europeos del siglo XVIII. Goethe en 1786 describió su visita al mismo.
Además la Universidad paduana le agrega a la edificación nuevas cátedras de Química y Agraria. En ésa época figuras como Carlo Goldoni (teatro), Ugo Foscolo (literatura), Giuseppe Tartini (música, compositor del ‘Trillo del Diavolo’) y Giacomo Casanova (literatura) se cuentan entre sus estudiantes famosos.



VIII. Desde 1797, cuando la República de Venecia llega a su fin del largo apogeo económico-político ejercido en todos sus dominios territoriales, hasta 1866 momento de la unificación como nación italiana, la Universidad de Padua sigue con su buen nivel académico, a pesar de los condicionamientos a la libertad intelectual y a la reducción de su mantenimiento económico.
Hoy en día sin duda alguna se considera que la Universidad de Padua ha sido, es y será el más grande monumento del civismo de la región del Veneto, fuera de los confines de su zona geográfica. El siglo XIX fue marcado por la doble dominación francesa y austro-húngara hasta que en 1867 se anexó al reino de Italia.
Entre los siglos dieciocho y diecinueve fueron destituidos o temporalmente alejados de la casa de estudios docentes de la talla de Antonio Collalto, Giuseppe Avanzini, Pietro Sografi, Stefano Gallini, Marco Carburi, Giuseppe Dubracvich, Giacomo Albertolli, Simone Stratico, Leopoldo Marco Antonio Caldani.
El patriota del ‘Risorgimento’ italiano como lo fue el historiador y epigrafista Carlo Leoni (1812–1872) junto a profesores y estudiantes de la Universidad de Padua participaron en el movimiento independentista hasta el 8 de febrero de 1848, cuando una revuelta de estudiantes manifestó contra la dominación austríaca, muriendo dos estudiantes y cerrándose temporalmente la universidad. Se expulsaron setenta y tres estudiantes y se destituyeron cuatro profesores Stefano Agostini, Francesco Marzolo, Antonio Valsecchi y Jacopo Silvestri.



Desde el punto de vista político la Universidad de Padua nunca se quedó atrás. Profesores y estudiantes por igual participaron de manera seria en el ‘risorgimento italiano’ para la independencia de Italia, incluyendo insurrecciones citadinas (1848).