yo.seria.feliz.si.pudiera.contarte.cada.dia.un.cuento.nuevo.
para.que.te.sientas.con.tu.familia.y.se.lo.cuentes.

.........................................................

El Patito Feo (página 1 de 5)

¡Qué lindos eran los días de verano! Bañada de sol se alzaba allí una vieja mansión.Ya era tiempo de sobra para que naciesen los patitos. Al fin los huevos se abrieron uno tras otro. "¡Pip, pip!", decían los patitos conforme iban asomando sus cabezas a través del cascarón. -¡Cuac, cuac! -dijo la mamá pata. ¡Ah, pero si todavía falta el más grande! ¿Cuánto tardará aún? Por fin se rompió el huevo. "¡Pip, pip!", dijo el pequeño, volcándose del cascarón. La pata vio lo grande y feo que era, y exclamó: -¡Dios mío, qué patito tan enorme! No se parece a ninguno de los otros. Al otro día hizo un tiempo maravilloso. La mamá pata se acercó al foso con toda su familia y, ¡plaf!, saltó al agua. -¡Cuac, cuac! -llamaba.Vamos, vengan conmigo y déjenme enseñarles el mundo y presentarlos al corral entero.
Eso es. Ahora hagan una reverencia y digan ¡cuac!¡Uf!… ¡Qué patito tan feo! No podemos soportarlo. Y uno de los patos salió enseguida corriendo y le dio un picotazo en el cuello. -¡Déjenlo tranquilo! -dijo la mamá-. No le está haciendo daño a nadie.En los días siguientes, las cosas fueron de mal en peor. El pobre patito se vio acosado por todos. Incluso sus hermanos y hermanas lo maltrataban de vez en cuando.
Tuvo que huir del corral
Entonces el patito huyó del corral. siguió corriendo hasta que, por fin, llegó a los grandes pantanos donde viven los patos salvajes.-¡Eres más feo que un espantapájaros! -dijeron los patos salvajes-. -¡Bang, bang! -se escuchó en ese instante por encima de ellos, y los dos gansos cayeron muertos entre los juncos, tiñendo el agua con su sangre. Los perros de caza aparecieron chapaleando entre el agua.Aquello aterrorizó al pobre patito feo
Apareció junto a él un enorme y espantoso perro: la lengua le colgaba fuera de la boca. Le acercó el hocico, le enseñó sus agudos dientes, y de pronto… ¡plaf!… ¡allá se fue otra vez sin tocarlo! El patito dio un suspiro de alivio. -Por suerte soy tan feo que ni los perros tienen ganas de comerme -se dijo.
La Cabaña
Echó a correr por campos y praderas; pero hacía tanto viento, que le costaba no poco trabajo mantenerse sobre sus pies. Hacia el crepúsculo llegó a una pobre cabaña campesina.En eso notó que una de las bisagras de la puerta se había caído tal que le sería fácil filtrarse por la estrecha abertura.
Creían que era una pata
En la cabaña vivía una anciana con su gato y su gallina.El gato lo saludó ronroneando y la gallina con su cacareo.. No andaba muy bien de la vista, así que se creyó que el patito feo era una pata regordeta que se había perdido-. ¡Qué suerte! -dijo-. Ahora tendremos huevos de pata.
-Creo que me voy a recorrer el ancho mundo -dijo el patito. -Sí, vete -dijo la gallina. Y así fue como el patito se marchó.. Y así fue como el patito se marchó. Era Otoño. Nadó y se zambulló. Cierta tarde, emergió de entre los arbustos una bandada de grandes y hermosas aves. El patito no había visto nunca unos animales tan espléndidos. Eran de una blancura resplandeciente, y tenían largos y esbeltos cuellos. Eran cisnes. Vino luego una helada tan fuerte, que el patito, para que el agua no se cerrase definitivamente, ya tenía que mover las patas todo el tiempo en el hielo crujiente.Era Invierno.Por fin, debilitado por el esfuerzo, quedose muy quieto y comenzó a congelarse rápidamente sobre el hielo. A la mañana siguiente, muy temprano, lo encontró un campesino. Los niños querían jugar con él, pero el patito feo tenía terror de sus travesuras y, con el miedo, fue a meterse revoloteando en la paila de la leche, que se derramó por todo el piso. Chillaba la mujer y quería darle con la escoba, y los niños tropezaban unos con otros tratando de echarle mano. Fue una suerte que la puerta estuviese abierta. El patito se precipitó afuera y pudo escapar.

Voló hasta el agua y nadó hacia los hermosos cisnes. En cuanto lo vieron, se le acercaron con las plumas encrespadas. -¡Sí, mátenme, mátenme! -gritó la desventurada criatura, inclinando la cabeza hacia el agua en espera de la muerte. Pero, ¿qué es lo que vio allí en la límpida corriente? ¡Era un reflejo de sí mismo, pero no ya el reflejo de un pájaro torpe y gris, feo y repugnante, no, sino el reflejo de un cisne!

Jamás soñé que podría haber tanta felicidad

En el jardín habían entrado unos niños que lanzaban al agua pedazos de pan y semillas. El más pequeño exclamó: -¡Ahí va un nuevo cisne! y todo el mundo decía: -¡El nuevo es el más hermoso! ¡Qué joven y esbelto es! Y los cisnes viejos se inclinaron ante él. Era muy, pero muy feliz. Y mientras recordaba los desprecios y humillaciones del pasado, oía cómo todos decían ahora que era el más hermoso de los cisnes. Jamás soñé que podría haber tanta felicidad, allá en los tiempos en que era sólo un patito feo.
_________________________
/FANTASMAKALIMERO/
elfantasmakalimero@hotmail.com/
elfantasmakalimero@yahoo.es/